Anticos de las cuatro de la tarde de este 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, tres parejas se casaron en la sección de panadería del Supermercado Avenida 10, en San José.
Entre anillos, testigos, familiares, curiosos y personas comprando el diario, los tortolitos se juraron amor eterno ante el aplauso romántico de quienes estaban presentes, ya sea porque fueron invitados o porque de pura casualidad se toparon con el evento.
La boda triple fue idea del Supermercado Avenida 10, el cual, semanas antes por medio de Facebook, invitó a sus clientes a aceptar el reto de casarse dentro de sus instalaciones. Más rápido que ligero, la lista de parejas, que aseguraron estar decididas a casarse en el súper, se hizo grande, pero todo estaba pensado solo para tres matrimonios al mismo tiempo, tal y como lo hicieron el año pasado.
Gabriela López y Hernán Hernández; Jennyfer Chavarría y Aarón Tuckler, así como Ana Sheffer y Anthony Chavarría, fueron los esposos que dijeron “sí, acepto” entre aplausos y cámaras de televisión y fotográficas, porque hubo tamaño poco de medios de comunicación presentes en tan particular lugar para una boda, bueno, para tres.
Como en todo matrimonio, hubo su momento de estrés puro y fue patrocinado por el abogado Andrés Durán, quien llegó casi una hora tarde. Estamos convencidos que si hubiese durado 15 minutos más, a las novias les habría dado un yeyo.
Hablando de las novias, Gabriela, Jennyfer y Ana, son mujeres empoderadas, seguras y decididas, porque fueron ellas las que, al darse cuenta de la propuesta del supermercado, se animaron a hacer los contactos para ver si salían favorecidas.
Hernán, Aarón y Anthony coincidieron en que les sorprendió mucho la iniciativa de sus parejas, pero de inmediato se dijeron: “¿Quién dijo miedo?”, y llenos de amor aceptaron que, si los llamaban, no tenían ningún problema en casarse.
Este martes les presentamos una nota de Jennyfer y Aarón, quienes se conocieron virtualmente por Facebook y este Día de San Valentín, ya en vivo y a todo color, dieron el siguiente paso en una relación que comenzó en el 2018.
Panes esperaron
Con tremendo ingenio y amor, la sección de panadería del supermercado dejó de vender pancitos por unas tres horas para ser adornada como un muy elegante nido de amor. Todo quedó precioso y se respiraba cariño en cada adorno: hubo globos, flores, arco bien adornado para las fotos de los esposos, vino y un queque de dos pisos para cada pareja.
“Es bien divertido cómo terminamos aquí porque somos de Hatillo 2 y como nos estábamos pasando de casa, pues decidí participar a ver si me llamaban y al final sí quedé entre las parejas. La verdad estamos muy felices de casarnos después de casi un año de ser pareja”, nos contó Ana.
“Después de ocho años y tres hijos (Alexánder, Samuel y Mía), nos casamos, es algo que nos tiene muy felices porque lo veníamos hablando desde hace tiempo. Nos amamos y considero que ya era el momento justo”, explica Gabriela.
Henry Blanco, del departamento de Mercadeo del Supermercado Avenida 10, fue el encargado del brindis y se mandó con unas muy lindas palabras, en las cuales recordó que la iniciativa del súper se da para fortalecer el pilar principal de la sociedad, como lo es la familia, y mantener la llama del amor más que viva dentro de los clientes.
El abogado Durán dijo: “Nada mejor que celebrar un 14 de febrero con amor y compromiso, para el supermercado es muy importante el tema de la fidelidad, por eso estas tres bodas son una perfecta celebración y exaltación del matrimonio”.
‘Invitados’
Entre los que estaban muy atentos a todos los detalles de la triple boda, vimos a don Róger Durán y doña Rocío Barrios, vecinos de Zapote, quienes tienen 23 años de estar juntos.
“Nosotros estamos aquí porque ayer (el 13 de febrero) vinimos a comprar y nos dimos cuenta que hoy serían las bodas, entonces nos vinimos para disfrutar de una actividad tan linda, porque el amor hay que celebrarlo siempre y en grandes cantidades. En verdad que nos encanta ver nuevos matrimonios por estos días que hay tanta falta de compromiso. Disfrutamos mucho el amor de las tres parejas”, explicó doña Rocío.
Después del brindis vino una pequeña celebración con boquitas, vino y hasta queque. Diferentes socios comerciales del supermercado aportaron regalos para los tres matrimonios.
“Siento que no hay un mejor día para casarse que el Día del Amor. Esta boda no la vamos a olvidar nunca porque cuando hay amor, cualquier lugar es especial. Estamos demasiado felices de habernos casado porque en verdad nos amamos. A partir de ahora todos los 14 de febrero serán superespeciales en mi hogar”, aseguró doña Jennyfer, ya como la esposa oficial de don Aarón.
El amor es real
Quien está que brinca en una pie de la felicidad es María Ester Flores, sicóloga especialista en familia. “Estas tres bodas en lugares no tradicionales, inesperados para muchos, es una muy linda manera de decirle al mundo que el amor existe, que el amor es real y que ellos lo quieren compartir.
“Es un acto de inspiración, de motivación para que muchos se den cuenta que no necesariamente hay que casarse en un hotel superlujoso, es una invitación al matrimonio y que los gastos no sean un pretexto. Me parece lindísimo que en un lugar al que tanto van, el supermercado del que son clientes, sea en el que se dieron el sí.
“Definitivamente el amor está en cualquier lugar. También aplaudo al supermercado por decirle sí al amor y al matrimonio, a la familia en un día de tanto conexión como el 14 de febrero”, aseguró.