La contaminación cruzada es cuando los microbios o microorganismos patógenos (que provocan enfermedad) de alimentos contaminados (normalmente, crudos) pasan a otros alimentos. Es una de las principales causas de intoxicación alimentaria, pero es fácil de prevenir por medio de recomendaciones que integran higiene y cuidado a nivel personal, de utensilios, etc.
La causa de la intoxicación alimentaria reside en la ingestión de microbios patógenos o toxinas producidas por algunos de estos organismos. Se producen vómitos y diarreas cuando los microorganismos liberan toxinas en los alimentos o cuando se multiplican más allá de ciertos niveles en el intestino. El nivel a partir del cual aparecen los síntomas varía de una persona a otra, dependiendo de la edad, el estado de salud y otros factores.
La higiene y el cuidado que se tiene al manipular y preparar alimentos es sumamente importante para prevenir infecciones e intoxicaciones alimentarias, las cuales son causadas por los microorganismos presentes en los alimentos.
Cuando se menciona higiene se incluye el ámbito personal, como primer aspecto a considerar, además de tomar en cuenta el lugar y el equipo a utilizar, la manipulación, cocción, almacenamiento de los alimentos, etc.
Algunos principios básicos para garantizar una adecuada manipulación e higiene de los alimentos son:
1. Lavar y desinfectar los utensilios con que se prepararán los alimentos así como las áreas y superficies que entrarán en contacto con los mismos.
2. Retirar las joyas, reloj, recoger su cabello (de tal forma que no vaya a caer en la comida).
3. Lávese las manos regularmente:
a. Antes, durante y después de manipular alimentos.
b. Cuando termina de manipular alimentos crudos y va a manipular los alimentos cocidos
c. Después de preparar un alimento y antes de pasar al siguiente.
d. Después de ir al baño o tocar objetos ajenos a los alimentos (zapatos, cabello, basura, etc)
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