Los tres bebitos, de los cuales uno habría sido vacunado por error contra el covid-19, están bien en el Hospital Nacional de Niños.
Los angelitos, de 2, 4 y 18 meses fueron trasladados desde el hospital Tony Facio, en Limón, hasta el centro médico capitalino para continuar monitoreando su estado de salud. Inicialmente se creía que los tres habían recibido la dosis contra el coronavirus.
Sin embargo, fue solo uno, pero los médicos no saben con precisión cuál de ellos es.
La información fue dada a conocer por las autoridades de la Caja de Seguro Social este martes, luego de que la auxiliar de enfermería que pudo haber cometido el error, diera aviso de lo ocurrido.
“Estamos muy contentos porque los chicos están en muy buen estado general, están activos, comiendo y con sus papás siempre en el hospital. Hemos monitoreado los resultados de las pruebas que se les hicieron en el hospital Tony Facio y este miércoles fueron trasladados al Hospital de Niños para hacerles pruebas más específicas”, explicó la doctora Carla Alfaro, directora del área de salud de Limón.
Una comisión compuesta por pediatras, inmunólogos y vacunólogos está siguiendo de cerca la evolución de los bebitos.
El área de Salud de Limón está haciendo la investigación y de momento la auxiliar de enfermería fue apartada de su cargo y trasladada a otra sede, donde no está realizando más vacunaciones, mientras se sabe si hubo error en la aplicación de la vacuna en alguno de los bebés.
La sede del ebáis donde ocurrieron los hechos se ubica en una zona bananera.
No es nuevo. La Teja conversó sobre el tema con la pediatra e infectóloga María Luisa Ávila y ella recordó que esta no es la primera vez que ocurre un hecho similar.
“Son errores que han pasado con bastante frecuencia en diferentes lugares del mundo. Eso pasa cuando los frascos son multidosis (en el caso de sarampión). Hay antecedentes, pero obviamente eso no justifica un error, por eso es que las personas que ponen vacunas tienen que ser bien capacitadas y tener protocolos sumamente estrictos para que este tipo de errores no ocurran”, explicó Ávila.
La también exministra de Salud recordó el caso de unos chiquitos a los que les pusieron 15 veces más de la dosis recomendada contra el sarampión y estuvieron en seguimiento por un largo periodo.
Ávila explica que no podemos saber qué podría pasar con los bebitos actuales porque no hay resultados de estudios realizados con bebés y vacunas anticovid.
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“Uno podría pensar que la reacción adversa que han manifestado con más frecuencia los adultos (dolor de cabeza) podría presentarse en estos niños, más potencializados porque es posible que por ser más pequeños, lo que requieran es la mitad de la eventual dosis que habrían recibido, aunque posiblemente no pase nada”, agregó la pediatra.
Juan José Romero, epidemiólogo de la UNA, dice que los estudios en niños de seis meses a cinco años en la vacuna anticovid están apenas empezando y los primeros resultados podrían estar listos hasta octubre o noviembre de este año.
“Por otro lado, los niños tienen un sistema inmunológico muy competente y en Costa Rica el sistema ampliado de vacunaciones los protege al nacer, con la vacuna BCG (contra tuberculosis) y ya a los doce meses se han recibido múltiples refuerzos, lo que da fe de que el sistema inmunológico les funciona muy bien. Uno podría esperar de que no haya efectos negativos en ellos”, comentó Romero.
Lo hecho por la Caja fue actuar de manera preventiva para que en caso de que se diera una reacción negativa, se atienda de inmediato a los bebitos.
Como lo sucedido se dio mientras se les aplicaba el sistema básico de vacunación de acuerdo a su edad, la doctora Ávila sugiere que lo más cauto es esperar al menos un par de semanas antes de pincharlos con lo que ya les tocaba recibir.
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