EscucharCarlos Alvarado, presidente de la República, solicitó este miércoles renegociar las convenciones colectivas y es porque algunos de los pluses salariales que incluyen están desangrando las finanzas del Estado.
Los pluses salariales nacieron para hacer más competitivos algunos salarios de bretes que nadie quería agarrar por el salario que ofrecían.
Sin embargo, con el paso de los años, esos beneficios se fueron haciendo más grandes y más absurdos en algunas entidades públicas.
Por eso Rocío Aguilar, ministra de Hacienda, les insistió a los diputados a poner de su parte en esta situación antes de que se convierta en una crisis.
La ministra estuvo la mañana de este jueves en el programa "Malas compañías", de Teletica radio, con Armando González e Ignacio Santos, y dio un claro ejemplo de que hay pluses salariales incomprensibles.
Por eso en La Teja nos dimos a la tarea de desnudar algunos.
Uno no sabe si reír o llorar
¿Responsabilidad?: Según dijo la ministra, hay empresas estatales que les pagan a sus empleados, además del salario, un monto de más por responsabilidad en el trabajo... ¿Cómo se mide eso? Si alguien lo sabe, que nos lo explique.
Lechita: Hay una empresa que les da una botella de leche por semana a todos sus empleados.
El tiempo es oro: Hay lugares de brete en los que el tiempo que usted dure de la casa al brete lo cuentan como horas laborales. Así cualquiera ama las presas porque si dura dos horas pegado, son dos horitas menos de brete.
Mecánico propio: Aunque usted no lo crea, hay instituciones que prestan el taller para que los empleados arreglen allí sus carros personales. Así uno se va en cualquier hueco y ni la cara arruga.
Personal del personal: Los empleados tienen fondos de ahorro y como alguien los tiene que administrar, contratan personal privado pagado por la empresa estatal.
Peligro... de ganar poco: Hay empresas que les pagan un porcentaje adicional a sus empleados por la "peligrosidad" del trabajo. Y no estamos hablando de policías.
Zonas ¿de dificultad?: A algunos funcionarios se les paga de más porque tienen que bretear (y vivir) en zonas "de dificultad" que, en algunos casos, no lo son.
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Anualidades: Se inventaron para darles un incentivo a las personas que realizan bien su trabajo y se terminó dándoselos a todos aunque no rindan bien y sean más sentados que fresco de balines.
Cesantía: Hay instituciones en las que usted tiene la bendición de que si se quiere ir no debe esperar a que lo echen para no perder la cesantía porque... aunque usted renuncie, ¡se la dan!
Partida doble: Hay trabajos donde le reconocen a sus empleados el título universitario dos veces. Por ejemplo, si usted es licenciado le dan más plata por eso y gracias a la convención colectiva le dan un poco más.
Cuatro por uno: Hay instituciones del Estado en las cuales si le piden a usted ir de emergencia al brete le pagan cuatro horas extra. No importa si va solo una, igual le pagan las cuatro.
¡Me caso!: Todos los costarricenses aportamos plata al Estado para que algunas empresas les den 35 mil colones a sus empleados si se casan.
A quemar pestañas: Dan el beneficio de ir a clases con goce de salario un máximo de seis horas semanales, o sea, todos los demás le pagamos los estudios.
Altura: Hay bretes donde a usted, aparte del salario regular, le pagan si trabaja en alturas muy grandes.
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Calor: De la misma manera ocurre en algunos bretes donde, además del salario, si un día le tocó meterse en un lugar con una temperatura que supere los 45 grados centígrados, va más platica para la cuenta.
Fuente: Ideas Labs.
