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A los 60 años aprendió a usar la computadora para montar un negocio y darle color al arroz con pollo

A los 60 años, sin saber nada, se animó a emprender produciendo achiote y aprendió a punta de videos en redes sociales

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“Usted no tiene idea de lo que me costó el curso de Economía Circular, como uno solo sacó sexto de la escuela y ni al colegio fui, que es donde podría haber visto eso, al principio era como chino para mí, pero gracias a Dios fui poco a poco y logré ganarlo, pero me costó demasiado”, nos dijo orgullosa doña María de los Ángeles Chaves Castro.

Esta vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera norte, se decidió a tener un negocito hace dos años, cuando tenía 60. No sabía nada, solo sabía que ella cuando se propone algo, lo cumple.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
Doña Marielos aprendió sobre el achiote a punta de videos en redes sociales. (Cortesía)

Después de un accidente laboral en su pierna derecha no tenía trabajo y estaba en su casa sin hacer absolutamente nada.

“Tenía 60 años y a esa edad me dije, ‘bueno, hasta aquí llegó mi vida laboral me quedaré sin hacer nada más’.

“Un vecino se dio cuenta que estaba sin hacer nada y comenzó a motivarme para que me pusiera a hacer algo, me habló de cultivar achiote, pero yo de eso no sabía absolutamente nada, solo lo conocía cuando lo compraba para cocinar”, nos explica esta emprendedora a quien conocimos gracias a los compañeros de Radio Santa Clara.

Con doña Marielos, como le dicen de cariño, queremos recordar que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebra el 27 de junio el Día Mundial de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas, o sea, el Día Mundial de los Pulseadores, de quienes se atreven a abrir su negocito contra viento y marea.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
No es un árbol cargado de mamones chinos, es de achiote, adentro de esos frutos rojos hay decenas de semillitas. (Cortesía)

Impulso

De un pronto a otro, Manuel, el amigo que la estaba motivando a emprender le llevó varios árboles de achiote. No le quedó más tren a doña Marielos que salir de la casa y ponerse a cultivar.

Le tocó meterse horas en las redes sociales para aprender, a punta de videos, cómo es la vaina de sembrar achiote y así avanzó muy bien.

“Iba sembrando y aprendiendo, sabía que si un día no aprendía no podía sembrar al otro y se me podían morir los arbolitos así que tuve que aprender contra el tiempo. Gracias a Dios el achiote es muy valiente y me pegó muy bien.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
Las semillas de achiote primero se ponen a secar. (Cortesía)

“Este 2023 el asunto está muy complicado por el clima, el sol pegó durísimo, el verano se extendió más de la cuenta y me afectó la cosecha, sin embargo, siempre pude sacar tamaño poco y con eso me la estoy jugando”, explica la dueña de “Achiote Norteño. La Semilla del Sabor”.

Con mucho orgullo doña Marielos explica que su achiote es del de verdad, aquel que usaban nuestros abuelos, o sea, la pura pasta y totalmente artesanal. Ella ahora conoce bastante del tema y para nada le gustan esos achiotes comerciales que anda por ahí bien cargados de manteca.

Dosis de amor

“El negocito ahí va, poco a poco. No me quejo. Eso sí, el achiote necesita mucho amor y yo se lo estoy dando porque la gente me ha respondido bien. Primero fue mi familia, después los amigos y poco a poco se fue corriendo la voz.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
Aquí ya tiene un buen poquito hecho doña Marielos de la pasa de achiote. (Cortesía)

“A pesar de que el calor golpeó duro, vieras que raro, el achiote solo da una cosecha al año y la de este ya pasó, pues vieras que los árboles están todos floreados y con semillas, cuidado y si no le saco dos cosechas. Creo que tiene que ver con que ha caído, gracias a Dios, bastante agua”, comenta la emprendedora.

Dentro de lo que le superencanta desde que se tiró al agua es que no solo le tocó aprender del achiote sino que hay instituciones que le están ayudando a aprender de todo.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
Una vez lo empaca puede irse directo a nuestro arroz con pollo para que agarre ese color amarillito que tanto nos gusta. (Cortesía)

“Vieras las estudiadas que tengo que darme. Nunca en mi vida me imaginé que iba a volver a usar cuadernos y a quemarme las pestañas estudiando”, comenta con gran alegría y orgullo doña Marielos.

“Era imposible imaginarme llevando un curso de relaciones con los clientes, de economía circular, de cómo las pymes son motores de crecimiento. ¿Sabe qué también me parecía imposible? Manejar la computadora, ahora resulta que como todas las clases son virtuales, la hago para acá y para allá la computadora. He aprendido demasiado. Ya son 31 cursos que aprobé”, agrega con el pecho lleno de pura felicidad.

Si usted quiere achiote de verdad, del de antes, llame a doña Marielos al 8634-4485, ella está para servirle y para darle color y sabor a su arroz con siempre.

Doña María de los Ángeles Chaves Castro, vecina de El Pavón en Los Chiles, pegando con nuestra frontera Norte, se decidió a tener un negocito de producción de achiote hace dos años, cuando tenía 60.
También envasa en vidrio para diferentes tipos de negocios. (Cortesía)

A celebrar

—  El Día Mundial de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas también deben celebrarlo los 488 mil trabajadores independientes que tiene el país, según confirma el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). De esos 488 mil pulseadores independientes, que corresponde al 23,4 % e incluye a las personas trabajadoras por cuenta propia y empleadoras, 343 mil son hombres, y 145 mil son mujeres.
Eduardo Vega

Eduardo Vega

Periodista desde 1994. Bachiller en Análisis de Sistemas de la Universidad Federada y egresado del posgrado en Comunicación de la UCR. Periodista del Año de La Teja en el 2017. Cubrió la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA en el 2001 en Argentina; la Copa del Mundo Mayor de la FIFA del 2010 en Sudáfrica; Copa de Oro en el 2007.

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