Niños y adolescentes de 66 países se reunirán este fin de semana para competir por ser el más carga inventor de robots entre 2.500 participantes.
La Olimpiada Mundial de Robótica se lleva a cabo por primera vez en Costa Rica y tiene como sede el Parque Viva, en La Guácima de Alajuela. Es un esfuerzo que busca motivar a los talentosos pequeños científicos a dejarse llevar por la imaginación y pensar en un mundo más tecnológico y eficiente.
Acompañados de maestros y familiares, los adolescentes llenaron los salones del Centro Kolbi con cajas de plástico, en las que guardan celosamente cables, bloques de legos, circuitos y láminas metálicas, con las que forman impresionantes robots que a la vez son programados para que hagan una función en particular como jugar fútbol, organizar bloques o cuidar plantas.
Chinos, sudafricanos, paquistaníes, coreanos, turcos, palestinos, sirios y la lista sigue de nacionalidades que se confunden entre los idiomas que se escuchan entre cada equipo.
La tecnología es parecida, pero los diferencian sus trajes que muestran los colores de cada bandera y los rasgos distintivos de trajes típicos como la delegación de los Emiratos Árabes Unidos, que llegó con sus trajes largos blancos y los turbantes.
Hassan Alqadi llegó de Emiratos Árabes Unidos y su grupo se distinguía desde largo por la ropa tradicional de Dubái, explicó que su traje estaba adornado con un listón rojo que tiene una frase escrita a la izquierda en su idioma y con la bandera de su país a la derecha.
Alqadi y sus compañeros de equipo portaron también su turbante: “lo usamos para vernos atractivos, es lo que vestimos en nuestro país”, explicó. Lo más curioso es que su delegación solo estaba conformada por hombres.
Otra de las delegaciones que sobresalió fue la de Malasia, que viene de una zona musulmana, por lo que las niñas compiten vistiendo sus burkas.
Saniah Omar es la instructora del equipo de Malasia, grupo que se distinguió porque ella y las niñas usaban sus velos.
A pesar de estar en un país extranjero no dejaron de lado sus tradiciones y agradecieron la amabilidad de los ticos y su pura vida.
Como ellas otras delegaciones de países musulmanes vistieron sus burkas en muchos colores, los que cubrían con ayuda de largos vestidos su cuerpo para dejar solo descubierto su rostro.
A ellas se sumaron las egipcias que además de su ropa se diferenciaron al comunicarse en lenguaje de señas porque todas son sordas.
La Olimipada empezó desde 2010 recogiendo lo mejor de la tecnología creada por estudiantes de escuela y colegio que buscan crear un mundo mejor, con ayuda de patrocinadores interesados en que los jóvenes se interesen en las novedades de la ciencia.