192 choferes fueron multados en enero por no respetar la luz roja del semáforo. Durante el pasado mes, cada 3 horas y 26 minutos, es decir, 7 por día, en promedio, se hizo un parte por esta infracción, que es por ¢248.000 y, además, se pierden 4 puntos en la licencia. En total, esos 192 “vivazos” pagaron en enero ¢47,6 millones.
“Estamos ante una conducta muy peligrosa. Cuando el conductor por descuido, a veces por estar usando el celular, o por premeditación, sigue su camino pese a la señal de Alto o del semáforo en rojo, se pone en riesgo su vida, la de los peatones y la de otros conductores.
“Entonces, cabe reflexionar que sea por una u otra razón, esta conducta puede traer graves consecuencias, como procesos judiciales, la cárcel, procesos civiles y, ante todo, mucho dolor en la propia familia o en otras, dejando una marca para toda la vida”, analizó Alexander Solano Quirós, director de la Policía de Tránsito.
Si bien el descuido o la intencionalidad puede causar tragedias, también está ese acto premeditado, voluntario, de no respetar el semáforo en rojo, tras confirmar que aparentemente es seguro seguir, algo que es igualmente reprochable pues es una maniobra permitida únicamente bajo ciertas circunstancias.
Así, Solano explicó que es posible girar a la derecha con el semáforo en rojo, las 24 horas del día, en tanto existan las condiciones para ello, como que no estén pasando vehículos, peatones o ciclistas y que no exista una señal que prohíba ese movimiento en rojo.
Además, recordó que es posible seguir directo, a la izquierda o a la derecha, con la luz roja, solamente entre las 10 p.m. y las 5 a.m., siempre y cuando estén dadas las condiciones para hacerlo y si se hizo un alto total, antes de hacer el movimiento.
Por último, respecto a los altos, en ocasiones, la sanción no se hace únicamente porque el conductor siguió directo, lo cual es muy peligroso, sino porque no hizo un alto, no se detuvo totalmente, como corresponde, en el cruce, sino que solo redujo la velocidad, tipo ceda, y es algo en lo que los conductores deben trabajar y mejorar.
Hacer un alto significa detenerse por completo y luego asomarse para continuar; no continuar, pese a la señal de alto.