En los talleres de carpintería de seis cárceles de Ecuador, un centenar de presos construye féretros para los fallecidos por la pandemia de coronavirus, que castiga con mayor fuerza a la ciudad de Guayaquil, informó el organismo que administra las prisiones.
El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI) informó en su cuenta de Twitter que los ataúdes “serán donados a las víctimas del coronavirs”, que están sobre todo en la provincia de Guayas y su capital Guayaquil.
Los ataúdes son hechos con madera detenida por el Ministerio de Ambiente en operativos de control de tala ilegal. Esa cartera tiene previsto entregar 734 metros cúbicos de material para los ataúdes, según un comunicado.
En las cárceles de Ambato, Quevedo, Santo Domingo, Portoviejo y Guayaquil, los presos cortan, clavan y pulen pedazos de madera hasta convertirlos en féretros, que llevan sobre su tapa una cruz.
"Estamos nosotros construyendo como privados de libertad y aportando en esta desgracia que atraviesa el país y el mundo entero, para las personas más necesitadas como es en el litoral con unos féretros", señala uno de los reos en un video difundido por el Ministerio de Ambiente.
Las cofres mortuorios serán entregados a las familias de escasos recursos a través de la fuerza de tarea conjunta creada por las autoridades para retirar en Guayaquil cadáveres de viviendas y calles, según dijo a la AFP un portavoz del SNAI.
En la andina Ambato se han elaborado los 30 primeros féretros que serán despachados a Guayas, donde está el 68% de los contagiados y más de la mitad de muertos por la covid-19 en la nación sudamericana. La pandemia de coronavirus deja en Ecuador 4.965 contagiados y 272 fallecidos.
Guayaquil, con 2,7 millones de habitantes, soporta el colapso del sistema mortuorio. El toque de queda de 15 horas ordenado por el gobierno de Ecuador para contener la propagación del virus frenó el servicio funerario, dejando a familias con los cadáveres de sus parientes dentro de sus viviendas por varios días.
Los féretros elaborados por los presos es una de las iniciativas que han surgido en el país para aliviar las dificultades en los servicios funerarios. El municipio de Guayaquil también ha hecho la entrega de al menos 1.000 cofres de cartón a familias pobres para que entierren a sus muertos.