El papa Francisco defendió el celibato de los curas por considerarlo un "don" para la Iglesia y rechazó que sea una "opción" para algunos, durante la conferencia de prensa este lunes 28 de enero en el vuelo que lo condujo de Panamá a Roma.
"Personalmente pienso que el celibato es un don para la iglesia. Segundo, yo no estoy de acuerdo con permitir el celibato opcional, no", afirmó al ser consultado sobre la posibilidad de autorizar el matrimonio de los curas.
Pese a ello, el pontífice argentino reconoció que en algunos casos se permitiría “por razones pastorales”, como por ejemplo para los curas de lugares muy remotos, entre ellos las islas pacíficas o el Amazonas.
"Es algo que debaten los teólogos, no es mi decisión", agregó con cautela.
Los católicos de rito oriental admiten la ordenación como sacerdotes de hombres casados, siempre y cuando elijan antes del diaconado estar casados o solteros.
El diaconado, el primer grado del sacerdocio, permite predicar, bautizar y servir en el altar.
El sacerdocio permite estar completamente a cargo de una parroquia.
Con respecto al rito romano, observado por la gran mayoría de los católicos, el papa insistió en el rechazo de tales prácticas.
El papa argentino citó a modo de inspiración una sentencia del papa Pablo VI sobre el celibato: 'Prefiero dar mi vida que cambiar la ley del celibato'.
Francisco ha señalado en varias ocasiones que la prohibición de la ordenación de hombres ya casados no es doctrina, lo que abrió el debate en varios sectores católicos.