El Senado de Mississippi aprobó la versión final de una propuesta de ley que prohibiría la mayoría de los abortos una vez que se detecte un latido fetal, lo que regularmente ocurre a las seis semanas del embarazo.
El gobernador Phil Bryant prometió que promulgará la iniciativa, la cual le dará a Mississippi una de las leyes sobre el aborto más restrictivas del país. La votación de 34 a favor y 15 en contra en el Senado estatal fue prácticamente en línea partidista, con los republicanos votando a favor y la mayoría de los demócratas en contra.
Hay esfuerzos en curso para aprobar medidas similares en varios estados del país, incluidos Georgia y Tennessee. Se tiene previsto que los partidarios de los derechos para abortar presenten una demanda para bloquear leyes de ese tipo.
Los opositores a la interrupción del embarazo están envalentonados por una mayoría conservadora en la Corte Suprema federal y buscan un caso que pueda desafiar la decisión del máximo tribunal de 1973 que legalizó la práctica a nivel nacional.