Un horrífico caso conmocionó a la ciudad de Río de Janeiro en Brasil: una mujer llevó en silla ruedas a un hombre muerto a un banco con la intención de hacerlo firmar un préstamo que se había aprobado a nombre del difunto.
Ella sería la sobrina del hombre que ingresó a la institución ya muerto. El hecho quedó grabado a través de un video capturado por los empleados bancarios. La Policía detuvo a la mujer.
Todo sucedió en horas de la tarde de este martes en una sucursal de Itaú Unibanco, ubicado en el barrio de Bangú al oeste de la mencionada ciudad brasileña. Allí, Érika de Souza Vieira Nunes se presentó con Paulo Roberto Braga en silla de ruedas para terminar la solicitud de un préstamo por 17.000 reales (más de un millón y medio de colones). Para esto, solo necesitaba la firma manual del hombre, según informó el medio O´Globo.
Fue llamada por los empleados y se acercó hasta la mesa iba a ser atendida. A pesar de que el hombre no se veía en las mejores condiciones, la operación inició. Cuando se le preguntaba sobre el estado de la persona, a quien calificaba como su tío, de 68 años, ella respondía que era “algo normal” en él y que no había nada de qué preocuparse.
Sin embargo, cuando llegó el momento de firmar, se descubrió la farsa. El hombre yacía inerte en la silla de ruedas. Érika intentó disimular que su tío no estaba muerto y le sostenía la cabeza por la nuca y le sujetaba la mano derecha junto con la lapicera para intentar firmar el documento.
Fue entonces que los empleados notaron que algo andaba mal. Uno de ellos tomó su teléfono celular y capturó el insólito momento. Insistentemente se escucha a una de las empleadas bancarias advertir que el hombre no estaba bien y que debían llamar a los paramédicos, sin embargo su sobrina se negaba y trataba de completar el préstamo sonriente.
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Al cabo de unos instantes, un superior se acercó a la escena y decidió intervenir. Se dio aviso a la Policía y los servicios de salud para que atendieran al hombre en silla de ruedas. Así, cuando llegó el Servicio Móvil de Atención de Emergencias (SAMU) se cercioraron de que Braga estaba muerto y la Policía detuvo a Souza. Fue llevada a declarar a una comisaría.
Ante los oficiales Érika declaró que era cuidadora de su tío, y que este estaba muy débil. La Policía investiga si ella realmente posee algún parentesco con la víctima. Se le podrían levantar cargos por malversación de fondos y difamación de un cadáver.
El capítulo quedó bajo investigación y aún resta conocer las circunstancias de la muerte del hombre, pero el equipo forense confirmó que la muerte no fue en el establecimiento, sino que había sucedido horas antes. El cuerpo fue remitido al Instituto Médico Legal para la autopsia.
Además, se informó que se averiguará si cuando se inició la solicitud del préstamo, de manera digital, el hombre ya había fallecido o si se trató del trabajo de Érika u otra persona para quedarse con aquella suma de dinero.