EscucharEn el mundo son miles las historias insólitas que se conocen diariamente. En los últimos días, la absurda ‘muerte’ de Baburam Bhil, un hombre de 40 años y de origen indio, causó gran sensación.
Medios internacionales aseguraron que el hombre vivió una pesadilla en los últimos meses, pues por error fue declarado muerto y trató de convencer a las autoridades de que está vivo, pero como no lo lograba, optó por ingresar al mundo de la ilegalidad.
El hombre, oriundo de Rayastán, en India, dice que su odisea comenzó cuando se enteró de que las autoridades habían registrado oficialmente su fallecimiento y, aunque desde ese momento intentó corregir el registro de diferentes formas legales, todas las peticiones que hizo fueron en vano.
Tras esto, empezó su tormento, pues creyó que las autoridades confiscarían sus propiedades, por lo que optó por una radical decisión con el fin de hacerse notar.
El 19 de julio, Baburam Bhil fue protagonista de los titulares de diferentes medios de comunicación locales, dado que armado con un cuchillo ingresó a una escuela local, generando gran pánico entre los estudiantes y cuerpo docente.
En su desesperada acción por confirmar que aún está vivo, hirió gravemente al director y a un profesor. Además, tomó a varios estudiantes como rehenes hasta que la Policía llegó y lo arrestó.
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En su declaración oficial ante la Policía de Rayastán, el hombre explicó que tomó esta radical decisión ya que, tras varios intentos de anular su certificado de defunción y sin obtener una respuesta favorable, lo llevó a actuar de esta manera, pues creyó que si cometía delitos, las autoridades se verían obligadas a reconocer su existencia.
“Si la policía me arresta, tendrán que registrar mi nombre, lo que probaría que estoy vivo”, aseguró Bhil. Tras su decisión, el hombre fue encarcelado y ahora enfrenta cargos por varios delitos graves. Sin embargo, vale la pena mencionar que su plan podría estar funcionando, ya que la Policía anunció que abrirá una investigación sobre sus acusaciones y el error presentado en su certificado de defunción.
