Michel de Notre-Dame, más conocido como Nostradamus, se convirtió en una verdadera referencia a la hora de predecir las grandes catástrofes mundiales.
El boticario y supuesto adivino dejó escritas hace más de 450 años una serie de profecías que parecían descabelladas, pero que varias de ellas se hicieron realidad.
Para este 2022 que está por comenzar, el autor del histórico libro Les Prophéties (Las Profecías), publicado en 1555, realizó una serie de predicciones que, según los intérpretes, parecen augurar un año con varios momentos complicados.
1. Cambio climático
“Bajo el clima babilónico opuesto, grande será sin derramamiento”.
Los intérpretes de Nostradamus aseguran que en esta línea el mítico francés se refiere al cambio climático, una realidad de nuestros días. Las consecuencias serán el hambre, la escasez de agua y los desastres naturales, por los cuales dos países se enfrentarán en una guerra por la supervivencia.
2. Golpe a Europa
“Templos sagrados del tiempo romano, rechazarán los cimientos de su fundación”.
Nostradamus vaticinó con esas palabras el final de la Unión Europea, según explicaron sus intérpretes. Tras el Brexit y las tensiones que provocó esa separación del Reino Unido, no sería extraño que se ponga en tela de juicio la continuidad de esta comunidad política entre los países del Viejo Continente. El francés menciona al “tiempo romano” porque en la antigüedad el poder estaba centralizado en ese imperio.
3. Muerte de líder
“La muerte repentina del primer personaje, será cambiado y pondrán a otro en su reino”.
Esta escalofriante profecía parece indicar que Nostradamus vaticinó, hace casi cinco siglos, que este año morirá una importante figura política mundial, según indicaron los expertos. Y que será reemplazada por otra.
4. Invasión
“Alrededor de la Gran Ciudad, habrá soldados alojados en campos y suburbios”
En una nueva profecía apocalíptica, Nostradamus parece indicar que este año una metrópoli será invadida por el enemigo. Los intérpretes incluso precisan que esta supuesta invasión se daría una ciudad europea.
Las que ha pegado
El profeta anticipó el gran incendio de Londres en 1566: “La sangre de los justos será demandada de Londres, en el año 66, quemada por el fuego”. También predijo el asesinato de Enrique IV de Francia en 1610. “Cinco décadas y siete no frenarán la carrera del gran león céltico, cuando un joven león con su leona, recurriendo a la Osa, furtivo, de su rival cortará el huso”, escribió.
Tampoco se equivocó con las bombas atómicas que se arrojaron sobre Hiroshima y Nagasaki, en Japón, en 1945. “Cerca de las puertas y dentro de dos ciudades, habrá dos azotes como nunca vio nada igual, hambre, dentro de la peste, por el hierro fuera arrojados, pedir socorro al gran Dios inmortal”, vaticinó.
Y se le adjudican otros aciertos impresionantes, como el asesinato de John F. Kennedy por un exmarine en 1963: “El gran rayo cae de día, mal y predicho por portador postulado: siguiente presagio cae de noche, conflicto en Reims, Londres, etrusca bubónica”. También los atentados del 11 de septiembre de 2001 a las Torres Gemelas: “Cinco y cuarenta grados el cielo arderá, fuego acercándose a la gran ciudad nueva: al instante, gran llama esparcida saltará”.