Hello Kitty (no el tierno personaje que todos conocemos) participaba y hasta cantaba en una iglesia evangélica hace unos años, pero ahora, con tan solo 21 años, era una de las narcotraficantes más temidas de Río de Janeiro, Brasil.
Y decimos que era porque el pasado viernes murió en un enfrentamiento a balazos con la Policía en el complejo de Salgueiro, en el área metropolitana de Río de Janeiro. En el fuego cruzado también falleció Alessandro Luiz Viera Moura, conocido como “Vinte Anos”, padrino criminal de Hello Kitty. Ambos eran integrantes importantes del Comando Vermelho, una de las mayores y más poderosas organizaciones de comercio ilegal de drogas en Brasil.
Los dos narcotraficantes fueron trasladados de la zona del enfrentamiento al hospital del lugar, pero al llegar allí ya habían muerto.
La criminal tenía causas abiertas en tres delegaciones policiales diferentes por robo, tráfico de drogas y por homicidios.
Pasado religioso
Rayane Nazareth Cardozo da Silveira, nombre real de Hello Kitty, solía exhibirse en redes sociales portando distintas armas de fuego.
Pero, según cuentan las crónicas de medios brasileños, hay registros fotográficos de ella, de años atrás, en los que se le puede ver cantando música gospel en una iglesia evangélica.
“La dama del narcotráfico”, como también le decían, nació el 25 de diciembre de 1999 y se crió en el Morro de la Isla de Concepción, en Niterói, que pertenece a la región metropolitana de Río de Janeiro.
Aparentemente, fue en 2018 cuando la muchacha, que cantaba en la iglesia evangélica, comenzó a ser buscada por la Policía por haber participado en diversos robos en la región. Según la prensa, la joven mutó de creyente a delincuente cuando conoció a su novio, junto a quien comenzó a asaltar gente, montados ambos en una motocicleta negra. En ese mismo 2018, la pareja de Hello Kitty murió en un tiroteo, pero ella continuó su trayectoria en el delito.
La muchacha se convirtió en guardia armada de la banda de narcotraficantes local. Posteriormente, se unió a la banda de Vinte Anos. Ya en esa organización, y apadrinada por el criminal que también fue abatido el viernes pasado, Hello Kitty participó en ataques a otras comunidades criminales, para ampliar el área de acción de su banda.
Se había convertido, además, en una figura en ambientes marginales, y hasta tenía una canción de funk dedicada a sus andanzas: “Tropa da Nova Greecia”.
Si bien en las redes sociales, Hello Kitty se exhibía constantemente, portando armas o en actitudes desafiantes, la joven tenía mucho temor de ser atrapada por la ley. Incluso, por eso ella había modificado un tatuaje que llevaba en su pierna (cambió un dragón por una geisha), se vestía diferente cuando salía de su guarida y constantemente cambiaba su manera de peinarse.