Misisipi, EE.UU.
AP
Willie Cory Godbolt, el hombre acusado de matar a tiros a ocho personas, incluida su esposa, en un área rural de Mississippi el fin de semana, ha tenido una vida marcada por la violencia.
Cuando Godbolt tenía 17 años, su madre mató a tiros a su padre, un policía de Brookhaven, de quien se había separado, dijo el jefe de policía Bobby Bell el martes.
En las dos décadas desde entonces, Godbolt fue acusado de agresión y delitos similares al menos una decena de veces, y hallado culpable en seis de ellas, muestran documentos de la corte.
Su esposa ya lo había acusdo de estrangularla y darle puñetazos, además de cubrirle la boca para que no pudiese gritar.
El fin de semana, Godbolt cometió su peor acto de violencia, cuando una disputa doméstica desembocó en una ola de asesinatos que dejó ocho muertos en tres casas. Y podría ser sentenciado a muerte.
Hace unos 20 años, la madre Godbolt acusó al esposo de violencia doméstica, pero los cargos fueron retirados. En 1999, usando la pistola de su exesposo, lo mató a tiros y se declaró culpable de homicidio y robo de vivienda.
Godbolt apenas mostró emoción en la corte el martes por la tarde, donde compareció esposado y con las piernas encadenadas.
Las víctimas de la masacre fueron el alguacil William Durr, Barbara Mitchell, de 55 años; Brenda May, de 53; Toccara May, de 35; Ferral Burage, de 45; Shelia Burage, de 46; Austin Edwards, de 11; y Jordan Blackwell, de 18.
En los últimos cuatro años, Godbolt fue acusado de amenazar y agredir a familiares y otros. Fue hallado culpable de agredir a puñetazos a un hombre y empujar a la esposa de éste durante un partido de fútbol americano en una escuela en octubre del 2013.