El expresidente panameño Ricardo Martinelli dijo que el juicio en su contra por presuntos cobros de sobornos de la brasileña Odebrecht está “amañado”, y afirmó ante una multitud estar dispuesto a que le “corten los huevos” si se demuestra su culpabilidad.
“Puedo decir que me corten los huevos si hay un real que me involucre a mí ahí, es puro bochinche (rumor)”, dijo Martinelli ante varios cientos de seguidores que marcharon en su apoyo hasta la Corte Suprema de Justicia, en Ciudad de Panamá.
Las declaraciones de Martinelli se producen después de que el pasado viernes la Fiscalía Especial Anticorrupción pidiera enjuiciarlo por presunto blanqueo de capitales (lavado de dinero) para Odebrecht.
Según la vista fiscal, Martinelli habría recibido, mientras gobernaba, presuntos sobornos de la constructora a través de sociedades pantalla y de una de sus empresas.
La investigación “deja claro que Martinelli tenía pleno conocimiento de la procedencia ilícita de los dineros que estaba recibiendo” de Odebrecht, según la fiscalía.
Además, “existió toda una estructura ilícita conformada por Martinelli, quien tenía pleno conocimiento de las actividades ilícitas que llevaba a cabo la empresa Odebrecht para cumplir con las coimas (sobornos) solicitadas dentro de su gobierno”, añade la acusación.
Lo aceptó todo
En 2016, Odebrecht se declaró culpable ante un tribunal estadounidense de haber distribuido más de 788 millones de dólares en sobornos a responsables gubernamentales, funcionarios y partidos políticos, sobre todo de América Latina.
En Panamá, la empresa reconoció haber pagado 59 millones de dólares en sobornos a cambio de la adjudicación de contratos para la construcción de obras públicas.
Los hijos del expresidente, Ricardo y Luis Enrique Martinelli, están encarcelados en Estados Unidos tras declararse culpables de recibir 28 millones de dólares en sobornos de la multinacional brasileña mientras su padre era presidente del país.