Los cosmonautas rusos que deben despegar el 14 de octubre hacia la Estación Espacial Internacional (ISS), dijeron el jueves que no usarán la vacuna contra el covid-19 fabricada por Moscú debido a su falta de fiabilidad.
"Personalmente, diría que no me vacunaré, porque soy muy cauteloso en este tema", dijo el capitán Serguéi Rýzhikov, con mascarilla, en una rueda de prensa en la Ciudad de las Estrellas.
Sin embargo, los astronautas no son libres de tomar decisiones sobre su salud por sí mismo.
“Son los médicos los que toman decisiones sobre la vacunación”, explicó el ingeniero de la futura tripulación, Serguéi Kud-Sverchkov.
"La decisión de recomendar la vacunación a los cosmonautas solo se tomará cuando se pruebe la vacuna y esté claro que es fiable", añadió.
Serguéi Rýzhikov también señaló que, desde el punto de vista epidemiológico, la ISS es actualmente el lugar más seguro del planeta, debido a los procedimientos sanitarios que se aplican a los seres humanos que van allí.
Rusia, empezando por su presidente, Vladimir Putin, elogió la eficacia de su vacuna "Sputnik-V" contra el nuevo coronavirus, desarrollada en tiempo récord, aunque solo se ha probado formalmente en unas pocas docenas de personas.
Unos 40.000 voluntarios serán vacunados en Moscú en las próximas semanas y otras miles de personas de varios países también se sumarán a las pruebas.