Steve Laviniere, de 59 años, pasó la tercera Navidad lejos de su familia desde que fue hospitalizado en marzo de 2020 a causa del covid-19.
Este DJ británico desarrolló una serie de consecuencias derivadas del virus, como daño cerebral severo, que le imposibilita caminar, hablar e incluso comer.
Aún así, su hermano gemelo, Bobby, dice que tiene la esperanza de que en 2023 Steve finalmente deje la unidad del hospital para regresar a casa.
En el momento en que se infectó, Laviniere fue puesto en coma inducido y, después de despertar, los médicos descubrieron que padecía leucoencefalitis hemorrágica aguda. La enfermedad, que es muy rara, suele ser mortal porque se trata de una reacción autoinmune del organismo derivada de una infección que lleva al propio organismo a atacar la mielina, estructura que protege a las neuronas.
“Las cosas podrían ser mucho peores. Debemos estar agradecidos de que Stevie todavía esté aquí. Cuando se busca en Google su diagnóstico, el primer párrafo que aparece dice que las personas normalmente no sobreviven una semana. Por eso es un milagro que Stevie siga aquí. Su alma todavía está aquí, sé que todavía puede escucharnos y estamos haciendo todo lo posible para traerlo a casa”, aseguró Bobby, quien formaba parte de un dúo musical con su hermano antes de la pandemia, al diario británico The Mirror.
También dice que en las últimas semanas su hermano ha movido los dedos de los pies y las manos, lo que contribuye a las expectativas de que el próximo verano (en junio), Steve regrese definitivamente a casa. Por el momento, solo puede salir del hospital cada ocho semanas para una breve visita de unas pocas horas.
En la última reunión, el 18 de noviembre, la familia celebró el cumpleaños de los gemelos. Ahora, la mujer de Steve, Julie, recibió luz verde para realizar las reformas necesarias en la casa donde viven para recibir a su marido de forma permanente.
“Una vez hecho (el trabajo), el plan es llevarlo a casa los fines de semana, para empezar. El amor y el apoyo que hemos recibido de la gente ha sido más que inspirador, es parte de lo que me hace seguir adelante”, dice Bobby.
El hermano cree que se contagiaron de covid-19 durante un evento en Madrid, España, poco antes de que se impusieran las medidas de aislamiento social. Bobby dice que, durante una reunión poco después de su regreso al Reino Unido, ambos sintieron que les faltaba el aire. En ese momento, fue él quien presentó un empeoramiento, mientras que Steve parecía estar mejorando.
Fue el propio Bobby quien fue ingresado primero en el hospital, donde también fue inducido a un coma para tratar la infección. Después de recuperarse, fue dado de alta, pero dos días después fue el turno de Steve de ser hospitalizado. Lamentablemente su camino fue otro y sigue internado.