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Aquejado de un fuerte dolor en la rodilla que lo obliga a moverse en silla de ruedas, el papa Francisco consultó al jefe del servicio médico del club de fútbol Atlético de Madrid, anunció este último en la radio española COPE.
José María Villalón explicó que la Conferencia Episcopal Española y la Nunciatura del Vaticano en España le solicitaron a él y a otros expertos “visitar al papa y hablar con el equipo médico del Vaticano a ver si lo (pueden) ayudar para que tenga una mejora en su movilidad”.
“Es un honor tener este paciente y luego, sobre todo, también una responsabilidad porque es una figura mundial”, declaró el médico en la entrevista a la radio que pertenece a la Conferencia Episcopal Española.
“Yo soy optimista de que se puede ayudar al papa” para que haga frente a su “proceso artrósico que afecta a varias articulaciones”, prosiguió el médico del Atleti, si bien señaló que por su “agenda tan complicada” podría serle difícil seguir regularmente sesiones de fisioterapia y rehabilitación.
“Yo creo es muy majo (simpático)” pero también “muy terco”, ya que se niega a someterse a una intervención quirúrgica, dijo el médico.
Efectivamente, el papa ha descartado la posibilidad de una cirugía ya que teme la anestesia, afirmando que aún tiene secuelas de la operación del intestino en julio de 2021.
El dolor crónico de rodilla de Jorge Bergoglio lo ha obligado a utilizar una silla de ruedas desde mayo y ha provocado el aplazamiento de varios viajes en los últimos meses.
El estado de salud del papa Francisco es objeto de numerosas especulaciones porque, debilitado por sus dolores, dejó “abierta” la posibilidad de renunciar un día a su ministerio.
El médico del Atlético dijo que pudo hablar de fútbol con el papa, quien es un gran aficionado de ese deporte y es simpatizante desde niño del club bonaerense San Lorenzo.
El papa “tiene una gran personalidad, está muy bien, muy lúcido, es un hombre muy grato, muy afable, muy simpático. Ademas le gusta el fútbol y también pudimos hablar un poco con él de ello” agregó José María Villalón, quien prevé volver a visitar al pontífice en el futuro.
