La vida no tiene precio, por eso, cuando se habla de prevención, vale la pena hacer un esfuerzo e invertir.
Quizá usted alguna vez haya escuchado hablar de las alarmas de humo, pero no ha hecho el intento de ponerlas en su casa, pensando en que “son muy caras” y/o que “no son tan buenas”.
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Para salir de dudas sobre estos dispositivos, hablamos con Rolando Leiva, de Ingeniería de Bomberos, y él fue muy claro sobre el tema.
“El rango de precios es supervariado, hay unas que rondan los ¢8 mil y también he visto de ¢40 mil y ¢50 mil, estas más caras son inteligentes, entonces se conectan a Internet, se pueden conectar a aplicaciones en el celular para que te avisen sobre alguna eventualidad y se integran con otros equipos del hogar, pero sus valores agregados adicionales no desmeritan el trabajo que hace una de bajo costo, pues hace exactamente la misma función, que es la más importante: alertar a la familia para que pueda proteger su vida en caso de una emergencia”, manifestó el experto.
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Estas alarmas están configuradas para que, cuando detectan una cantidad específica de humo, suenen durísimo y de forma molesta, para avisar y despertar a cualquiera, por más profundo que sea su sueño.
¿Dónde deben colocarse?
Leiva dice que para que estas alarmas funcionen de forma adecuada, se recomienda poner varias dentro de la casa.
“Lo ideal es que se coloque una en cada espacio para dormir y también en la sala. No deben colocarse a menos de tres metros de la cocina porque si se pone una muy cerca, cuando se preparan los alimentos se van a estar teniendo falsas alarmas; entonces, luego de varias veces de que se active por falsas alarmas, las personas le pierden la importancia o la atención”, explicó.
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Por esa misma razón, no es recomendable poner de esas alarmas en el garaje o la cochera, porque se van a dar falsas alarmas por el humo del carro o la moto.
En cuanto al mantenimiento que se tiene que dar a estos aparatos, es mínimo. El funcionario dice que lo único que hay que hacer es cambiar las baterías.
Leiva dice que la mayoría de esas alarmas funciona con una batería cuadrada que dura como un año. Los dispositivos tienen dos luces: una, que por lo general es verde, está encendida cuando la batería está bien, y otra, que por lo general, es roja, se enciende cuando la batería ya no sirve, indicando que hay que cambiarla.
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Hay otras alarmas que traen unas baterías que duran como diez años y cuando se agotan hay que cambiar el aparato completo. Precisamente, 10 años es en promedio la vida útil de las alarmas de humo.
El bombero dice que es muy común que la gente ponga alarmas y luego no les cambien las baterías; es decir, quedan prácticamente, de adorno y esa no es la idea.
“Las alarmas de humo son muy efectivas; en la mayoría de casos avisan cuando apenas está empezando el incendio, entonces los mismos interesados logran controlarlo. Hay pocos casos registrados por lo mismo, porque al final no tienen ni que llamar a los bomberos.
“Recuerdo un caso de una persona que vive en unos apartamentos en La Sabana y se estaba bañando cuando empezó a sonar la alarma, salió a ver qué pasaba y vio que había humo y la misma persona lo apagó”, contó.
Para que se haga una idea de dónde puede comprar alarmas de humo y cuánto cuestan, le contamos que en Steren hay unas a ¢9.900; en EPA vimos dos, una en ¢13.395 y otra en ¢22.750.
En El Lagar encontramos una a ¢11.120 y en Ferretería Brenes vimos una en promoción a ¢7.565.