El presentador de Giros, Ítalo Marenco, se pegó la pelada de su vida esta mañana durante la cobertura a la campaña de vacunación que se desarrolla en Repretel.
Al macho le encomendaron ir a hablar con las personas que llegaron a vacunarse y en eso se topó a un hombre y una mujer, quienes de una vez intuyó que eran madre e hijo.
Ítalo les empezó a entrevistar y poco después surgio el “trágame tierra”.
“¿Su grandote es? En este Día de la madre que venga la mamá a comerse la fila con usted, mis respetos para usted señora”, dijo Marenco.
La señora lo agarró por el lado amable y entre risas le comentó: “no es mi hijo, es mi esposo”.
Como era de esperarse, el presentador no sabía ni dónde meterse y apeló a la improvisación para salirse del colocho en que se metió.
“Es que es un esposo joven y guapo también, ¿han ido a otros lugares a pulsear la vacuna?”, preguntó para cambiar de tema.
Aguantando la risa, Marenco dio el pase a sus compañeros en el estudio.
Apenas terminó el programa y fiel a su estilo, el macho vaciló con lo que le pasó.
Subió una historia donde se le ve dándose por la jupa y diciendo que en televisión en vivo todo puede pasar, además un video en el que camina por los parqueos de Repretel gritando: “lo único que puedo decir es que viva el amor”.