Un vendedor ambulante que ama la música urbana con mensaje cumplió el sueño de grabar profesionalmente uno de sus temas. Y pudo hacerlo gracias a que el destino lo llevó a encontrarse con Gonín.

Juan Francisco Núñez Trejos la pulsea todos los días en el cruce de Limonal, en Abangares de Guanacaste, vendiendo tortuguitas de resina con imán para pegar en la refri.

Días atrás se topó con el ganador de “Tu cara me suena” --o sea, Gonín-- y seguró penso “ahora o nunca”, así que le ofreció sus productos rapeando.

Como la ha visto tan fea por la pandemia, Núñez Trejos (su nombre artístico) escribió el tema “Vendiendo en las calles”, en el cual dice que no es un delincuente, que se gana al pan con el sudor de su frente (la rima es de él) y no dudó en cantársela al alajueliteño.

Gonín quedó como loco con la pieza, lo grabó con el celular y compartió el video en sus redes sociales para que más gente conociera el talento del abangareño, quien tiene 37 años y estuvo un tiempo privado de libertad.

Cuenta Núñez Trejos que cuando se conocieron, Gonín le prometió que lo iba a ayudar grabándole la canción en su estudio. Al principio dudó...

“No se la creí porque varios cantantes nacionales me han dicho lo mismo, pero se vuelven pura paja, como dicen. Yo lo que canto es gospel, música con mensaje cristiano porque tengo un testimonio muy fuerte. Anduve veinte años en las drogas, en las calles, en la cárcel y eso ahora no vende musicalmente”, explicó.

Pero Gonín cumplió y la semana pasada ya estaban en el estudio. Y no se quedaron en eso, también se fue con él para el centro de San José y grabaron el video, todo sin cobrarle un cinco.

La historia del pulseador le tocó el corazón al artista alajueliteño. Dice que no dudó en tenderle la mano porque sabe que muchos solo necesitan ese empujón para darse a conocer y avanzar.

“Cuando lo escuché me gustó mucho porque llevaba buena métrica y la letra de la canción está muy bonita. Él tiene un gran talento, solo necesitaba apoyo, y lo que más me gustó es que canta de su realidad y eso le gusta a la gente”, mencionó.

LEA MÁS: Gonín grabó video bailando para celebrar que ya firmó el divorcio

Componía en la celda

Núñez Trejos creció en la ciudadela 15 de Setiembre, en San José, y por los malos consejos de amigos cayó en las drogas desde muy joven.

Llegó a cometer delitos y en el 2012 fue a dar a la cárcel, de la que salió cuatro años después por buen comportamiento.

Cuando estuvo encerrado empezó a escribir basándose en su historia personal y ya tiene quince temas.

“En abril 2014 decidí hacer un cambio en mi vida y entregarle mi vida a Cristo y todo lo que escribo son experiencias que yo he vivido. De hecho, este tema (“Vendiendo en las calles”) lo compuse hace como un mes, un día que la estaba viendo fea con ese calor que hace aquí en Guanacaste y todo el mundo me cerraba la ventana del carro, me menospreciaban y me decían que busque un brete. Uno tratando de cambiar la vida y me salen con esas cosas, lo que hice fue sentarme a escribir”, contó.

Este primer video que ahora tiene ha sido una gran bendición en su vida, dice. No han parado de felicitarlo y quienes lo han visto y pasan por el cruce de Limonal se detienen para comprarle una tortuguita.

“Un día de estos pasó Marcela Negrini y me compró unas, toda linda ella”, dijo.

La pista en la que grabó el tema es de su amigo productor Kdosh (Gary Sánchez), quien se la regaló.

LEA MÁS: Gonín habló como tico y ganó Tu cara me suena

Semillita de fe

Núñez Trejos espera que su mensaje de fe y testimonio de vida lleguen a muchos jóvenes para que se den cuenta de que las drogas y el “nada va a pasar”, como le decían a él las malas juntas, son el peor camino.

Él aprendió de sus errores y la pulsea humildemente vendiendo para poder mantener a su esposa y a sus dos hijos.

“Tengo mucho tiempo de estarlo intentando y he tenido muchas decepciones, he llevado mis canciones a la radio y me han cerrado las puertas. Otros artistas me han ilusionado y me han dicho que me van a ayudar y nada, y esto me demuestra que Dios conoce el anhelo de nuestro corazón y Él sabe lo que uno quiere. He querido abandonar mi sueño muchas veces, porque aquí es muy difícil vivir de la música, y esto ha sido como esa pequeña semillita de fe”, dijo.