La futbolista trans Mara Gómez, que este martes se sumó al equipo Villa San Carlos de la liga de fútbol femenino argentina, se convirtió en la primera en su condición en ser parte de este torneo.
Ella aseguró que no tiene una ventaja física y que está “preocupada” porque todavía no está fichada en la AFA.
“La diferencia física no es real. Hay un montón de jugadoras con mucha más fuerza y velocidad que yo y no son hombres. No tiene nada que ver”, dijo la delantera, de 22 años, al diario Clarín.
“Vayamos al ejemplo de (Lionel) Messi. Un extraordinario del fútbol, que mide 1,60 metros y el tema de las hormonas no lo hizo el mejor del mundo, se fue perfeccionando entrenando toda su vida. Si Messi juega contra hombres, ¿por qué lo tienen que perseguir entre cuatro?”, añadió.
La atacante consideró que hay jugadoras mucho mejores que ella y que todas las personas tienen que tener el derecho de hacer deporte, estudiar y trabajar.
Villa San Carlos, último en la Primera División con solo un punto tras haber disputado diez jornadas, anunció este martes que Gómez y Ludmila Angeli, las nuevas incorporaciones del club, se entrenaron en el primer día de la pretemporada a la par de sus compañeras.
Gómez, que cambió el género de su documento de identidad a los 18 años, reconoció haber sido discriminada y excluida durante su adolescencia y que incluso llegó a pensar que no quería vivir más y que la vida no tenía sentido.
“Mi paso por el fútbol empezó a los 15 años, no sabía jugar al fútbol (...). Era demasiado mala jugando, pero me di cuenta de que me estaba haciendo bien, que me despejaba de un montón de cosas y me tranquilizaba la mente. Tomé el fútbol como una terapia, le empecé a dedicar tiempo”, explicó.