“Sex and the City” es una serie de televisión estadounidense que empezó a tocar temas del empoderamiento femenino desde su aparición en 1998, con polémicas como el aborto, la homosexualidad, el sexo casual, entre muchos otros.
Este fin de semana se cumplieron 22 años desde que apareció en la pantalla chica Carrie Bradshaw, uno de los personajes más queridos por mucha gente, que fue interpretado por la actriz Sarah Jessica Parker y aunque miles de seguidores hubieran querido ver más aventuras, la serie sólo tuvo seis temporadas.
Ir más allá de los estereotipos es algo que dejaron los personajes interpretados por Cynthia Nixon, Kristin Davis, Kim Cattrall, junto a Parker que, sin tapujos, en cada capítulo trataban de demostrar la fortaleza que tenían como mujeres al enfrentarse a cada situación difícil de su acontecer cotidiano.
Las personas recuerdan con cariño a Charlotte York, quien durante la trama soñaba con una vida perfecta, conocer a su príncipe azul, formar una familia y ser feliz para siempre. Pero la vida la llevó a enfrentar al fracaso de un matrimonio que conllevaría al divorcio y al no poder ser madre por un problema de infertilidad.
Aunque el personaje pasó momentos muy difíciles, al final descubrió que el estereotipo de un príncipe azul no es necesariamente un hombre guapo o con plata, descubrió que existe algo más importante que lo superficial y que así como ella, hay muchas mujeres que no pueden tener hijos, pero existen otras opciones como la adopción.
Ser una mujer profesional y al mismo tiempo ama de casa, es lo que dejó Miranda Hobbes, quien representó a todas aquellas mujeres que luchan por romper la idea de que las mujeres sólo deben quedarse en casa.
LEA MÁS: Dos estrellas de Sex and the city no se pueden ni ver.
Ella mantenía al marido que cuidaba de su hijo y atendía la casa. En la actualidad Cynthia Nixon sigue demostrando su fortaleza y lucha mediante el activismo, se ha manifestado por el respeto al derecho de las mujeres y a la legalización del aborto.
Hablar sin miedo de la sexualidad y demostrar los deseos sexuales con normalidad es algo que representó el personaje de Samantha Jones, quien también tenía una carrera exitosa y era empoderada, tenía el control sobre su vida y su cuerpo, ella podía salir con muchos hombres sin importar las críticas sociales.
Experimentó ser lesbiana, tener una relación estable con un solo hombre, además de vivir un momento muy difícil al ser diagnosticada con cáncer, que pese a ello, siempre se mantuvo firme.
La inolvidable Carrie Bradshaw dejó la reflexión de todas las vivencias de sus amigas y de ella misma, su pasión por estar a la moda la hacía ser una compradora compulsiva, especialmente de zapatos, pero también reflejó el dolor del desamor y su incansable lucha por encontrar el amor de su vida.