Ronaldinho es considerado uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos, pero también se ha ganado la fama de fiestero.
Para muestra un botón, ya que este lunes el exfutbolista jaló de fiesta al famoso bar el Cuartel de la Boca del Monte, lugar donde disfrutó de la música de la agrupación nacional Marfil.
El morenazo, según dicen, jaló del Cuartel" pasadas las 2:30 a. m., o sea, como que estuvo muy alladito.
Claro, la fiesta de la anoche anterior le pasó la factura, porque al día siguiente Ronaldinho tenía que estar a las 11 a. m. en la farmacia La Bomba, ubicada en San Francisco de Heredia para participar en una firma de autógrafos a la que llegó casi una hora después.
El exjugador de la selección brasileña llegó con lentes oscuros y se hidrató con bastante agua, incluso se tomó un cafecito. Por lo visto se estaba quitando los efectos de la parranda.
Al diablo con los moralistas
Y aunque no es ningún pecado que a alguien le guste la fiesta, el exdelantero tuvo que dar la cara en muchas ocasiones en entrevistas acerca de los cuestionamientos que la prensa le hacía por actividades fuera de la cancha.
En el 2008 cuando jugaba en el AC Milan, confesó que después de terminar su tarea sobre los terrenos de juego le gustaba jalar a divertirse en las discotecas.
"Tras el trabajo me gusta divertirme. Y las discotecas están para eso, al diablo con los moralistas”, había dicho el exjugador al diario italiano La Stampa.
Escándalos
En Futbolred.com hicieron un repaso de los escándalos más sonados de Ronaldinho, quien también disfruta moviendo las caderas sobre las pistas de baile, donde conquista a hermosas mujeres con sus movimientos.
1. Fiesta en Brasil con compañeros de Selección y 40 condones (2007)
El morenazo organizó una fiesta tras una fecha eliminatoria. La sonada celebración no les agradó a los seguidores brasileños quienes reprocharon la actitud fiestera de los futbolistas. La rumba se extendió desde el jueves en la noche hasta el mediodía del viernes. Ronaldinho fue el alma de la fiesta, ya que el astro salió a las 11 de la mañana escondido en el baúl de un auto para evitar el acoso de la prensa. Lo curioso del caso es que según se supo días después, las estrellas de la auriverde pidieron por lo menos 40 condones durante el festejo.
2. El fallido túnel de escape a la discoteca en Flamengo (2012)
Debido a los resultados que registró con el Flamengo, la elevada ficha que pagaban por él (5 millones de euros) y las repetidas salidas nocturnas los dirigentes convocaron a Dinho a una reunión para controlar sus actos de indisciplina. Ronaldinho respondió con una estupenda idea: comprar una discoteca frente a su casa, y acudir al ayuntamiento para construir un túnel subterráneo de su casa al salón de fiestas, justificándolo por "motivos de seguridad". Sin embargo, la idea fue descartada y el exjugador del Barcelona se quedó sin túnel para huir de los periodistas que lo perseguían durante sus escapadas.
3. 32 años solo se cumplen una vez, pero la celebración duró 5 días (2012)
Con dinero de sobra para gastar y de vuelta en Brasil, Ronaldinho aprovechó su cumpleaños número 32 para reservar un hotel en Río de Janeiro durante cinco días. Ese tiempo duró el festejo. Acusado por los seguidores y directivos, el brasileño restó importancia al asunto, y reprochó que en Europa nadie se mete en la vida privada de los jugadores.
4. Tres días de fiesta antes del clásico de la Madonina (2010)
Al llegar al Milan de Italia se pensó que Ronaldinho sentaría cabeza, pero en el 2010 antes de enfrentar el clásico frente al Inter, el crack reservó una suite en un lujoso hotel durante tres días, en los que estuvo con unos amigos y bellas modelos. Se estima que gastó más de 75.000 euros (¢50 millones). Ya en la cancha, Milan perdió 2-0 ante el Inter y la afición le echó en cara el escándalo extrafutbolístico.
5. Se fue de fiesta y nunca volvió al Atlético Mineiro (2014)
Tras ganar la Copa Libertadores, y la Recopa Suramericana con el club, el morenazo se despidió de sus compañeros con total normalidad para tomar unos días libres, pero Ronaldinho no se presentó y nadie supo de su paradero, hasta que circularon unas fotos redes sociales donde se veía bien enfiestado.