Yuri Tolochko, el fisicoculturista y actor ruso que se hizo popular en el mundo después de casarse en el 2020 con una muñeca inflable, vuelve a ser noticia debido a una de sus peculiares salidas.
Luego de idas y vueltas, pinchaduras e infidelidades, su curiosa historia suma un capítulo más: ahora afirma que se enamoró de un cenicero.
El caso del ruso, que admitió ser pansexual (que le entra a todo) que llamó la atención cuando se comprometió en 2019 y luego se casó en 2020 con una muñeca inflable a la que llamó Margo.
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Él aprovechó el reconocimiento adquirido, por lo que mostró la boda en video, pero después comenzaron algunas problemas, como en toda relación.
Primero quedó devastado cuando se le reventó Margo a finales del año pasado. La llevó a arreglar para festejar juntos la Navidad, pero en mayo de 2021 decidió divorciarse luego de haber adquirido otras dos muñecas inflables llamadas Luna y Lola.
Sin embargo, Luna y Lola, las dos muñecas con las que admitió ser “infiel” a Margo, no son los únicos objetos que conquistaron la atención del hombre, ya que en la actualidad reconoce haber tenido un flechazo con el cenicero de un bar.
Tolochko confesó que mantiene una relación sentimental con este objeto metálico, después de un episodio que describe en sus redes como una “decepción amorosa”.
“Me gusta el olor, la sensación del metal en mi piel. Es fantástico. Me gusta que toque mi piel, me excita, es lo que me atrae de este cenicero”, admitió en su cuenta de Instagram.
Tolochko aseguró que quería volver a verlo y tocarlo de nuevo por la esencia que tiene debido a haber pasado por numerosas historias.
De acuerdo a lo que revela, llegó a un acuerdo con los dueños del bar para que le presten el cenicero en algunas ocasiones durante la noche.