El presentador Yiyo Alfaro pudo estar cerquita de unos de las personas que más admira en todo el mundo.
El tico contó que, por pura casualidad, pasó a tomarse un café en Madrid, antes de regresar a Costa Rica, tras su paso por Qatar.
Allí vio un afiche que decía que nada más y nada menos que Antonio Banderas se presentaba en ese lugar y como Yiyo lo considera uno de sus hérores de infancia, no dudó en meterse a ver la obra.
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“Llegué a un teatro que también es hotel, afuera un afiche con la imagen de uno de esos héroes y personas que admiro en el mundo, era Antonio Banderas, entré buscando comprar un café, le pregunté a un hombre si tenía información sobre la obra que anunciaban en el afiche… me dijo que la obra era en dos horas, corrí a la taquilla y le pregunté a la mujer que estaba ahí si quedaba alguna entrada, me dijo que una, ¡era la mía definitivamente!”.
“No me moví del restaurante del hotel con mi café esperando la obra, tenía esa sensación de que Antonio tenía que estar ya en ese hotel, probablemente se queda en una de sus habitaciones, ¿y si viene por un café acá al restaurante? Era posible, estuve atento pero nunca llegó. Dos horas más tarde estaba sentado en las primeras filas esperando ver a ese pedazo de actor”, contó con mucha felicidad en sus redes sociales.
Alfaro aseguró que verlo en vivo y a todo color le reafirmó más lo que siente ante semejante figura.
“La actuación de Antonio Banderas no hizo más que recalcar la admiración hacia él y su maravilloso elenco. La obra terminó, tomé fotografías como un loco, la gente se empezó a ir del teatro pero yo me quedé en mi butaca. Poco a poco me fui acercando al escenario, ya casi todos en la sala se habían ido, me acerqué aún un poco más y lo vi en el fondo hablando con el director de la orquesta, esta es la parte que me da un poco de vergüenza pero me temblaron las piernas y quedé congelado, estaba a escasos 10 pasos de uno de los actores que tanto admiro en el mundo… iba a llamarlo y no lo hice y no perdía nada pero no lo hice, no pude.
“Me fui del teatro con esa sensación de tan cerca pero tan lejos, a lo mejor algún día estrecho su mano y le cuento esta pequeña anécdota de esos accidentes del destino que me llevaron a estar a unos cuantos pasos de uno de mis ídolos. Por cierto la obra es sobre un hombre de 50 años que aún sigue soltero y con crisis existenciales”, señaló el tico que se nota que estaba como chiquito con juguete nuevo.