Tal parece que hay gente que no entiende que estamos en pandemia y deja fluir sus más oscuros deseos sin importar las consecuencias.
Un ejemplo es lo que pasó este fin de semana en Bélgica, donde la policía tuvo que interrumpir una auténtica orgía en un céntrico bar de Bruselas, la capital, en el que encontraron a 25 hombres, a un diputado y a varios diplomáticos bien apuntados, según cuenta el diario Marca.
A pesar de que todos los establecimientos de entretenimiento están cerrados por precaución y hay un estricto toque de queda nocturno, los agentes se vieron obligados a multar a todos los asistentes que se encontraban pegándose la fiestota, según asegura el medio local que estuvo en la celebración.
El diputado involucrado es József Szájer, del partido ultranacionalista de Hungría, quien está siendo duramente criticado por sus acciones.
La polémica fue tanta que el político publicó un comunicado en el que reconoce su participación en la orgía. Szájer renunció tanto a su escaño (puesto en las cámaras de representación) como a su actividad política por lo que de haber cometido algún crimen podrá ser juzgado.
Bélgica, país al norte de Francia está superando la peor crisis que ha vivido en toda la pandemia cuando a finales de octubre se dispararon las cifras de contagios totales hasta los 23.921 al 30 de noviembre, mientras que en la actualidad han conseguido controlar la curva situando la incidencia en menos de 3.000 casos, promedio, durante la última semana.