El periodista William Bonilla regresó a sus labores en Informe 11 Las Historias luego de superar el covid-19.
El comunicador estuvo “fuera de las canchas” dos meses y 20 días, pero pese a eso dice sentirse como nuevo, pues todo este duro proceso de salud hasta lo llevó a perder más de 15 kilos y a cambiar de mentalidad, porque ahora disfruta más y se preocupa menos.
El presentador de la sección “La cuchara tica” se enteró que tenía el virus el 17 de junio, aguantó diez días en su casa a ver si se sentía mejor, pero siempre terminó internado en el hospital Max Peralta, de Cartago, hasta el 5 de julio, que le dieron la salida.
Este lunes 6 de setiembre acudió a una nueva cita de control en el hospital San Juan de Dios y para su sorpresa todos los exámenes que le hicieron salieron puras tejas, por lo que le dieron de alta.
Ya no tendrá, ni siquiera, que estarse tomando el pastillero que le mandaron al salir del hospital, lo único que debe hacer son unos ejercicios para recobrar la fuerza que perdió en las piernas.
“Este martes puede volver al trabajito desde que pasó todo esto y la verdad me siento muy motivado porque ya aquí ando reporteando. Me siento feliz de que todo haya pasado, pero no crea, igual me siento cansadillo de las rodillas para abajo porque todavía me duele mucho la planta de los pies, pero ya me hacía falta volver a trabajar en lo que tanto me gusta, que es andar por los pueblos”, dijo.
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Dura recuperación
El cartaginés contó que su recuperación duró tanto porque además de haber quedado muy débil, sus pulmones no estaban funcionando al 100%.
Durante el tiempo que estuvo incapacitado tuvo que ir al hospital constantemente a hacerse diferentes exámenes y pruebas para descartar una posible fibrosis pulmonar o una trombosis, secuelas que suele dejar este peligroso virus.
“Las pruebas que me hacían en el hospital no daban luz verde todavía, el resultado no era positivo. Después de casi un mes de haber salido del hospital yo decía que el proceso iba muy lento.
“Cuando vengo al San Juan de Dios el neumólogo me dice que, como yo tomé 97 pastillas de prednisona que es un esteroide (desinflamatorio), un efecto secundario es una cándida, que es un hongo que se hace a nivel de boca y todo sistema digestivo y eso me dio, entonces, tuvieron que mandarme antibiótico”, explicó.
Luego de pasar tantos días tragando medicamentos, está muy feliz porque ahora solo tiene que tomarse unas vitaminas para recuperar la masa muscular y la energía.
En la cita que tuvo el lunes anterior también le hicieron la última prueba de gases arteriales (que es por medio de extracción de sangre) y también le fue puras tejas.
“Salí en 95 en la oxigenación, usualmente cuando uno está mal daba menos de 90, entonces, superé la prueba”, mencionó muy feliz.
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Bien comelón
Lo único positivo esta dura prueba que le tocó vivir --aparte de estar vivo-- es que antes pesaba 110 Kilos y ahora está en 95 kilos, es decir, que ahora se ve menos cachetón en tele.
Sin embargo, ahí espera ir reponiéndose cada vez más, gracias a la buena cuchara que dice tener su esposa Karla Araya, pues ya ha ido recuperando más el apetito y anda antojadísimo.
— "Ando todo el día como si anduviera magullado en las piernas, esa es la única sensación que me quedó", William Bonilla
Además, contó que hace unos 22 días se llevó un gran susto luego de recibir la primera dosis de la vacuna anti covid-12, porque lo revolcó dos días.
“Fue como si tuviera covid de nuevo, me sentía cansado, me dolía el cuerpo, pero ahí vamos. La segunda dosis me tocaba en noviembre, pero me la adelantaron para la primera semana de octubre, a ver como nos va”.
Gran mensaje
Ahora que regresó a la calle y anda grabando historias por los pueblos dice estar aprovechando la ocasión para aconsejarle a los entrevistados que se cuiden aún más y que se vacunen.
“A todos les hago énfasis de que se cuiden, les cuento mi experiencia. Les digo que si uno no se cuida, nos es jugando la cosa, es lo menos que puedo hacer después de pasar por un susto como este”, agregó.
Mentalmente también dice sentirse muy bien, tanto que hasta rechazó la ayuda sicológica que da la Caja a los pacientes que superan el virus.
Lo único que seguirá recibiendo es la terapia física para ver si las deja de sentir menos pesadas las piernas, más ahora que ya anda por todo lado.
Más positivo
El brumoso asegura que esta dura prueba lo hizo valorar más la vida y comprender que cada minuto es importante para ser feliz.
Además, lo hizo entender que hay que darle menos cabeza a los problemas y aprovechar cada momento con la familia.
“Ahora valoro más la vida, me dejó la lección de cuidarme más, de tratar de llevar un mensaje de que se cuiden de esta carajada, porque todavía hay mucha gente incrédula”.
Todo este tiempo que estuvo en reposo no se perdió un solo programa de Informe 11 y dice estar muy feliz de por fin reencontrarse con su otra familia, la del canal, a la que extrañó montones.