El periodista José Miguel Cruz ahora se dedica a vender “la tierra prometida”, como él le dice a su nuevo negocito.

Por culpa de la pandemia, el comunicador tomó la difícil decisión de cerrar el negocito de comidas “La esquinita de JM” que tiene en Puriscal y quedarse solo con el local que está cerquita del hospital Calderón Guardia.

Entonces el presentador del espacio Más que noticias de canal 7 tuvo que inventarse una nueva forma de hacer dinero para no despedir a sus ocho “esposas”, como les dice a las cocineras y empleadas de sus dos restaurantes.

“Un día estaba pensando y dije: ‘Jesús dame luz para ver qué hago porque no quiero despedirlas', y recordé lo de la tierra prometida. Y es que a la par del restaurante (de Puriscal) hay un señor, don Eladio Jiménez, que me vivía hablando de una tierra que él prepara y que tiene la fórmula perfecta”, contó entre risas.

JM decidió entrarle al negocio con el señor y ponerse a vender sacos de tierra con abono en el centro de San José y con el dinero que logra con las ventas les paga a sus cocineras y empleadas.

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Entrega especial

El comunicador contó que, como ahora a muchos les ha dado por hacer sus propias huertas en casa o dedicarse a sembrar matas, el negocio se le ha hecho rentable.

JM contó que su amigo puriscaleño tiene años de estudiar la tierra y que se inventó una fórmula para que cualquier mata pegue y dé buenos frutos.

“Don Eladio la prepara con mucho cariño y le mete todos los desechos del ganado, de las vacas que tiene en su propiedad y, además, tiene componentes orgánicos y un buen oxidante, lleva una fórmula que él se inventó. Es un señor que ama la tierra y se ha dedicado a investigar cómo producir de una manera armoniosa y orgánica”, explicó.

Los sacos de 25 kilos valen 5 mil colones y el mismo periodista es quien se encarga de dejarlos en la casa del cliente sin costo alguno.

JM confesó que él también es amante de las matas y que de hecho su casa está llena de plantas que le han regalado sus entrevistados.

“Mis matas y el tener que chinearlas fue una de mis terapias para no salir corriendo de la desesperación al ver que tengo dos negocios, uno funcionando al 25% y el otro cerrado, y con cuentas por pagar, los salarios, el alquiler, la luz, el agua... Por eso tuve que buscar hacer algo más porque de lo contrario no salgo”, aseguró.

Si quiere comprar un saco de la “tierra prometida” puede contactar a JM al número 8866-1551 y él mismo se lo lleva hasta la casa.