El gobierno francés prepara una ley para entrarle con los tacos de frente al acoso sexual en las calles, indicó la secretaria de Estado de la Igualdad entre Hombres y Mujeres, Marlène Schiappa, en una entrevista publicada en el diario La Croix.
Schiappa, de 34 años, es feminista y quiere combatir los comportamientos pachucos contra las mujeres en los lugares públicos con esta legislación prevista para el 2018.
“Es completamente necesario porque en este momento el acoso callejero no está definido en la ley”, apuntó Schiappa.
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El creciente escándalo sobre las supuestas agresiones sexuales cometidas por Harvey Weinstein, productor de Hollywood, contra varias actrices, ha reavivado el debate sobre el acoso sexual en Francia.
Debido a lo anterior, la etiqueta MeToo que anima a las mujeres a compartir sus experiencias de acoso se encuentra entre las 10 principales tendencias en Twitter en Francia y una nueva ha surgido: #balancetonporc (“Desenmascara al cerdo”) para denunciar el acoso sexual, pero en el brete.
Cuando se le preguntó sobre la dificultad de trazar una línea entre el acoso y el coqueteo, Schiappa respondió: “sabemos muy bien en qué momento comenzamos a sentirnos intimidados, inseguros u hostigados en la calle”.
Citó ejemplos como cuando un hombre invade el espacio personal de una mujer: hablándole a 10, 20 centímetros de su cara, o si un hombre sigue a una mujer durante varias cuadras o pide su número 17 veces.
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El gobierno pidió a un grupo compuesto por cinco diputados que trabaje con la policía y los magistrados para encontrar una definición de acoso que pueda ser aplicada por los agentes en las calles.
“El nivel de la multa es parte de nuestras discusiones”, dijo Schiappa, y agregó que la policía actuaría de acuerdo con las quejas que las mujeres le presenten.
La legislación también incluirá disposiciones tales como ampliar el tiempo que las mujeres tienen para presentar denuncias por agresión sexual, ya que algunas son desde que eran niñas y endurecer las leyes sobre el sexo con menores.