El video de una mujer que porta un velo y baila durante un crucero se difundió en redes sociales sin su consentimiento y se hizo viral, pero destrozó su vida personal y provocó un fuerte debate entre autoridades y militantes feministas sobre los derechos de la mujer en Egipto.
Aya Yussef, profesora de árabe desde hace tres años en una escuela primaria de El Mansurá, al norte de El Cairo, nunca pensó que sería noticia cuando bailó junto a sus colegas, mujeres y hombres, durante un paseo en un barco por el río Nilo.
El video fue visto millones de veces y dejó un montón de comentarios despectivos hacia la profesora.
“Vulgar”, dijeron algunos, “violación de la ética docente”, añadieron otros. Los comentarios también apuntaron al marido, por haber autorizado este comportamiento.
El marido, dolido por las opiniones de estos desconocidos, solicitó y obtuvo inmediatamente el divorcio de la madre de sus tres hijos.
El propio Ministerio de Educación se hizo cargo del caso, ordenando que Yussef y cinco de sus colegas fueran enviados ante un consejo disciplinario para quitarle su trabajo, el cual por suerte pudo recuperar, ya que el ministerio acabó reincorporándola a sus labores.
En las redes sociales sin embargo, algunas voces denunciaron que el video fue grabado y publicado sin el consentimiento de la mujer.
Esta es la raíz del escándalo, en un país como Egipto, conocido desde hace décadas por su cine y la canción árabe. Sus cabarets han hecho soñar desde Rabat hasta Adén y en sus bodas y fiestas, todo el mundo baila.
Pero la difusión de una visión rigorista del islam desde los años 70, las tradiciones conservadoras y los ataques contra los derechos de las mujeres han rodeado de tabú y críticas unas prácticas que son aceptadas en privado, pero denunciadas y juzgadas con rigurosidad en público.
La propia Yussef tardó un tiempo en aceptar hablar públicamente y dijo a los medios locales que la escena filmada era “algo normal”.
“Estuvimos en un paseo en barco el fin de semana, mucha gente bailó, no solo yo”, repitió.
Pero para entonces el daño ya estaba hecho, ya que la joven madre vive en un país donde los maridos suelen lograr la custodia, por lo que pronto perdió a sus hijos y su matrimonio se desmoronó.
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En Twitter, la actriz Haidi Karam denunció "una historia disparatada ante la que todo el mundo calla".
En un video publicado en Facebook, la abogada Nihad Abu al-Qumsan, directora del Centro Egipcio para los Derechos de las Mujeres, propuso contratar a Yussef para su gabinete de abogados.
Pero la abogada no se detuvo ahí. “Acudiremos a los tribunales para averiguar si el delincuente es el que colgó el video en Internet o el que bailó”, prometió.