Una mujer será llevada a juicio por acosar sexualmente a su instructor de ejercicios en el gimnasio al que acudía en España.
La Fiscalía de área de Gijón solicitó la condena por un delito de acoso sexual a la clienta del centro de entrenamiento debido a que pasó de los piropos a querer forzar un encuentro íntimo con el empleado del lugar.
El diario La Voz de Asturias publicó que según el Ministerio Fiscal la mujer le pidió al instructor de manera reiterada mantener “relaciones sentimentales y sexuales”, a lo que el trabajador del gimnasio “se negó” a pesar de la insistencia incansable de la clienta.
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La necedad de la mujer fue tanta, que incluso llegó a perseguir al muchacho por las instalaciones y a persistir con sus pretensiones sexuales con otros trabajadores del centro, motivo por el cual la fumigaron del gimnasio sin poder hacer caritas.
Después de su expulsión, la mujer intentó cumplir con su cometido, acosando al musculoso en las inmediaciones del gimnasio, al punto que el hombre tuvo que esconderse para evitar encontrarse con ella.
Ante la imposibilidad de perseguirlo, el acoso de la mujer se trasladó al mundo cibernético, ya que le envió audios, emoticonos, mensajes y videos muy calenturientos.
La supuesta acosadora sexual se enfrenta a una posible condena de cuatro meses de cárcel y a una multa de 3.000 euros (poco más de dos millones de colones) para indemnizar al instructor por daños y perjuicios.