Miguel Cortés confirma que Oro y Grana dejará de transmitirse

El reconocido periodista y productor deportivo Miguel Cortés apagará su micrófono y dejará de transmitir para siempre su programa Oro y Grana, después de casi 46 años de estar al aire.

El locutor tomó la decisión de jubilarse a sus casi 75 años, tras hacer famosa su frase: “Oro y Grana, su programa deportivo”, el cual se transmite actualmente por radio Monumental (93.5 F M), de lunes a viernes de 4 a 5 p. m.

Cortés nos confirmó que esta semana conversó con el gerente de la emisora para hacerle saber que no renovaría más el contrato pues su gran deseo es descansar y como dice él: “No hacer nada”.

La Teja conversó con el famoso locutor deportivo para conocer sus motivos.

– ¿Cuándo comunicó la decisión de retirarse?

– La noticia aún no la he dado abiertamente. Simplemente conversé con el gerente (Hernán Azofeifa, de radio Monumental) y le dije lo que pensaba. Fue apenas hace unos días, el lunes o martes, así que posiblemente me retire en febrero.

– ¿Por qué toma la decisión?

– Porque son muchos años, son casi 46 años de hacer el programa y considero que ya es suficiente lo que he dado y punto. Hacía un tiempo que lo venía manejando y por eso es que lo he decidido. Es mejor que le digan a uno: ‘¿Por qué se va?’ a que le pregunten: ‘¿No se ha ido?’. De tal manera que yo quiero hacerlo ahora que el programa está en muy buena posición y tomé la determinación de que fuera este año.

No es una decisión que se toma de la noche a la mañana, porque hay que pensar algunas cosas y consideré que este era el momento oportuno o por lo menos el preciso para comunicarlo con la gerencia porque yo firmo contratado cada año y ya correspondía hacerlo.

– Es decir, ¿el programa va a morir con su salida de la radio?

– Morir suena como feo, pero sí, de momento es así. Si yo no estoy, no se hace.

– ¿Cuándo termina el contrato con radio Monumental?

– El contrato se termina en febrero y por eso pensé que era oportuno hablar con Hernán Azofeifa y él me entendió.

– ¿A partir de cuándo dejará de transmitirse?

– A finales de febrero.

– ¿Ya ha pensado cómo será ese último programa?

– Vieras que no, no he planeado nada, en eso no he pensado aún. A lo mejor o posiblemente comparta con los contertulios más allegados, imagínese cuántos son con 45 años, pero ya habrá tiempo para eso. Claro que sería totalmente diferente por ser el último programa.

– ¿Cómo se ha sentido estos días después de hacer oficial la decisión?

– Me he sentido bien porque uno siempre tiene que tomar decisiones en la vida y me he sentido tranquilo, hay algunas cosas que cambiarán evidentemente, pero pienso que todo saldrá bien.

– ¿Las cuentas de redes sociales de Oro y Grana van a seguir activas?

– Obviamente, todo eso también desaparecería.

– ¿Qué es lo que más desea hacer ahora que va a tener más tiempo libre?

– (Risas) Lo que más deseo es no hacer nada. Yo disfruto hacer el programa, pero en ese momento producirlo es tedioso y son cosas que tal vez la gente ignora. No es que uno llegue y se sienta a la mesa y empieza a hablar, no es así, hay que leer, hay que estudiar, hay que oír y todo lo que usted lee, estudia u oye se debe verificar. Es una labor como de hormiga, así que para cuando uno llega a la emisora ya lleva un guion mental. Todos los días se debe preparar el programa, sin dejar de lado que también hay que estar buscando publicidad. Todo es un cóctel de cosas que uno toma en cuenta, pero básicamente llega un momento en el que uno dice: ‘Ya, lo que hice lo hice y no hago más’. Quiero llevarla al suave, como dicen.

–¿Cuál cree que fue la clave para que su programa se mantuviera al aire por tantos años?

– El programa no solo se ha mantenido por muchos años, sino que también en los primeros lugares de audiencia. Yo siempre he dicho que Oro y Grana es un programa serio, pero no aburrido, porque también tenemos sentido del humor pero dentro de lo que se comenta se le da la seriedad y somos absolutamente veraces y eso le ha gustado al oyente por eso lo ponen a uno en un lugar importante en el dial.

– ¿Qué siente que le han dejado tantos años en la radio?

– Muchísimos amigos, aunque también no amigos. El hecho que constantemente, modestia incluida, se le reconozca a uno cuando se ha hecho algo bueno, por el tipo de entrevistas o un comentario. He tratado de hacer algo que creo que en otros programas deportivos no se ha hecho y he tratado de imponer un estilo y creo que lo he logrado conseguir. Además, que yo sepa, no se hace un editorial en otro programa deportivo, no digo que no exista, pero yo no lo he oído. Yo cree una sección que llamé ‘Mi opinión’ y cuando uno editorializa quiere decir que es algo responsable para que también el público sepa que no es solo informar, tertuliar o comentar, sino que se editorializa y creo que algo queda.

– ¿Siente que ese es el legado que le dejará a la radio costarricense?

– Pienso que sí, pero sobre todo la constancia y la forma de hacerlo. Si usted dura cuarenta y resto de años pues algo habré hecho bueno, pero no solo yo sino también los compañeros que durante muchísimos años han estado conmigo.

– ¿Alguna anécdota que recuerde con cariño?

– Un montón, pero usualmente yo hago programa en diferentes lugares o si algún club de primera división me lo pide, así que una oportunidad fuimos a hacer un programa a Cartago y yo confundí el nombre del restaurante. Llegué con mi compañero y dijimos que veníamos a hacer el programa y pregunté dónde estaba el teléfono y nos ubicaron. Cuando eso estábamos en radio Reloj y empezábamos a las 6 p. m., pero resulta que tenía que llegar el dirigente de Cartago y eran las 6:20 y no llegaba, por lo que lo llamamos y nos dijo que nos estaba esperando, es decir, nosotros nos habíamos metido al lugar equivocado y al rato llegaron donde estábamos.