EscucharMelania Villalta reveló que durante su tiempo como presentadora en El Chinamo se tuvo que arreglar y producir tanto para verse más guapa de lo que ya es, que quedó algo cansada del maquillaje y los peinados.
La joven, quien se estrenó como presentadora del programa de fin de año de canal 7, contó mediante sus redes sociales que todos los días se ponía cremas y aceites en su cuerpo para lucir radiante, a pesar de que no le gusta tanto sentir eso en su piel.
“Algo muy curioso que me pasó durante el programa fue que me ponía mucha crema, perfumes, estos aceites que son para darle brillo a la piel, de todo, es que obviamente es parte de mi trabajo entonces me producía mucho, pero siento que todo eso me hizo querer hacer un descanso de todo, porque estos días estoy como que me baño y no quiero ponerme nada de nada”, dijo entre risas.
La macha mencionó que, a pesar de que se ponía todas estas cositas, ella no es fan de untarse nada de eso en su cuerpo, pero lo hacía para lucir mejor y más bella frente a las cámaras.
“Yo sé que la crema hidrata el cuerpo y todo, pero yo no soy fan de ponerme eso, como esas personas que salen del baño y se ponen crema en todo el cuerpo. A mí no me gusta, odio demasiado la sensación de la crema en mi cuerpo y que me toque la ropa, ¡ay, no! No me gusta. De todas maneras no me gusta, pero obviamente lo hacía”, detalló.
La guapa afirmó que ahora lo único que se pone después de bañarse es un poquito de perfume para oler rico, porque se está dando un descanso de todo eso.
“Siento que es una sensación donde me produjeron muchos días y ahorita lo que quiero es tomar ese descanso, no sé, es algo raro”, contó.
La modelo y presentadora también expresó que para darse ese descanso también se quitó las extensiones que le daban mucho más volumen a su pelo y aunque estaba fascinada por cómo se veía, prefirió quitarse ese “peso” de encima.
La presentadora de VM Latino optó por verse más natural en los últimos días del año para darse ese respiro tras su participación por El Chinamo, que cerró temporada el 23 de diciembre.
