Megan Fox rompió su silencio sobre un duro momento en su carrera como actriz.
La guapa veía constantemente sexualizada su imagen en películas, anuncios y medios, algo que le hizo llegar al límite.
Fox sitúa esos pensamientos en 2009 después del lanzamiento de “El cuerpo de Jennifer” (Jennifer’s Body), una película de terror de la que fue protagonista.
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"No fue solo esa película, fue todos los días de mi vida, todo el tiempo, con cada proyecto en el que trabajé y con cada productor con el que trabajé”, contó al programa Entertainment Tonight.
Esa atención no deseada a su físico tuvo un efecto muy severo en la actriz: “Creo que tuve un colapso sicológico real, donde no quería hacer nada”.
“No quería que me vieran, no quería tener que tomarme una foto, hacer una revista, caminar por una alfombra, no quería que me vieran en público por el miedo y la creencia, y la certeza absoluta de que se iban a burlar, o me iban a escupir, o que alguien me iba a gritar, o que la gente me apedrearía o me atacaría por estar fuera”, contó.
Para ella no todo había sido un camino de rosas en la industria del cine. La actriz detalló que no había contado nada hasta ahora por miedo a no ser apoyada por el público y sus compañeras de profesión.
“No sé si alguna vez habrá un momento en el que se me considere normal, que la gente conecte conmigo o que guste a los demás”, expresó.