Después del fallecimiento de algún famoso, se empieza a especular sobre quiénes serán los herederos y esta no es la excepción con la muerte de Julián Figueroa, hijo de Maribel Guardia.
Julián Figueroa, por ejemplo, recibió de su padre el cantante Joan Sebastian, un rancho conocido como Las Palmas, en Cuernavaca, Morelos en México.
Este rancho está valuado en aproximadamente $11 millones (más de 5 mil millones de colones), pues tiene caballerizas, bungalós, amplios jardines y una enorme piscina.
Sin embargo, según el Código Civil Federal de México, cuando no existe un testamento todos los bienes y fortuna pasan directamente como herencia a los hijos y a la viuda, en este caso al pequeño Juliancito, de cinco años y a su madre, la cantante Imelda Garza.
De acuerdo con esto, Maribel no recibiría ni cien colones de la fortuna de su hijo, salvo que haya dejado un testamento en el que se mencione a su madre como beneficiaria.
Su padre, el cantante Joan Sebastian había comprado Las Palmas, a finales del noventa, pues la idea del músico era construir un restaurante.
Además, Julián dejó un par de relojes que también se los había obsequiado en vida su padre, según confirmó Telemundo.
LEA MÁS: Esposa de Julián Figueroa reveló cómo fueron los últimos momentos de vida del cantante
Figueroa también logró acumular dinero gracias a sus trabajos como actor y cantante.
En una entrevista para el programa “Sale el Sol”, el tío de Julián, Federico Figueroa, expresó que no sabía si su sobrino tuvo tiempo de planear algún tipo de testamento, ya que su muerte fue muy repentina.
Julián murió el 9 de abril de un infarto.