Costó, ¡pero llegó! La modelo Marcela Negrini luce un hermoso anillo de compromiso en el dedo anular de su mano izquierda.
La guapa orotinense dio el sí este domingo, después de decir que no (vacilando), tras la propuesta que le hizo su novio Tercero Castro, en una habitación de un hotel en Manuel Antonio.
La pareja tiene dos años de jalar y aunque ya habían hablado de casarse, el coronavirus impidió que se diera la tradicional propuesta de matrimonio, por lo que este fin de semana fue el momento ideal.
El guapileño se lució y con la ayuda de una de sus hermanas le planeó una bonita sorpresa a la modelo, tal y como ella se la imaginaba.
Ellos ya habían hablado de que se querían casar el 9 de abril de este año, pero como la pandemia se paseó en todo la pasaron para el mismo día, pero del 2021.
Marce nos contó algunos detalles de la propuesta y de su vida en pareja, donde nos terminó de confirmar que está viviendo una etapa muy feliz de su vida.
-¿Cómo estuvo el finde? Vimos que por fin llegó el anillo...
Muy bien, bueno, el anillo ya estaba hace tiempo, nada más que él quería hacer algo bien especial y bonito y con la ayuda de las hermanas preparó todo. Una de ellas le ayudó mucho, él le dijo lo que quería y ella se encargó de todo.
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-¿A dónde fueron?
El lugar se llama Tulemar, en Manuel Antonio, aquí estuvimos desde el sábado, hicimos un paseo en familia, fuimos a andar en cuadraciclo y cuando llegamos, en la tarde-noche, ahí estaba la sorpresa.
-¿Cómo fue esa propuesta?
Llegamos a la habitación y estaba decorada de lo más linda, con globos, pétalos de rosa y fotos de los dos. Cuando me lo propuso primero le dije que no (risas), para molestarlo, a ver qué cara ponía y yo pensé que iba a poner una cara así como de qué dicha, pero no, él sabía que era vacilando y ya después le dije obviamente que sí.
-¿Cómo se siente después de recibir esa sorpresa?
Era una sorpresa, pero yo ya me lo sospechaba, pero fue bastante bonito, me emociona mucho porque fue muy lindo.
-¿Cómo describe los dos años que llevan de jalar?
Ha sido una aventura, hemos pasado varias etapas, de conocimiento, de madurez, de encontrarnos, de aprendizaje, ha sido de todo, han sido dos años bastante intensos, que la verdad se nos han ido muy rápido.
-¿Qué le generó tener que cancelar la boda que estaba para abril?
Fue un poco triste y extraño porque la idea era hacerla en el extranjero y como no se podía salir, ni hacer nada, lo pospusimos, incluso, yo dejé el vestido en Nueva York donde mi familia, pero lo malo es que no sabíamos cuándo hacerlo porque no habíamos podido hacer ni siquiera lo del anillo. Ya cuando liberaron un poco, él lo hizo.
-¿Y pusieron fecha?
Sí, ayer (domingo) nos pusimos a pensar que sería bonito hacerlo el 9 de abril, que fue la primera fecha en que quedamos y que es cuando cumplía años mi mamá. Es un día que va a representar siempre mucho para mí.
-¿Cómo se imagina su boda?
Uy, eso sí que no sé, ya tenía una idea lista, pero ahorita no sé si pueda ser, entonces apenas sepa voy a pensar, de momento no quiero hacerle mucha mente.
-Aparte de ser una relación saludable, por el estilo de vida que llevan, ¿se consideran una relación sana?
Sí, la verdad es que ha sido muy lindo, diferente a lo que estaba acostumbrada (risas) ahí vamos avanzando cada día más, conociéndonos en muchos aspectos que eso es lo más importante.
-A ciertas edades uno busca algo más que un físico, ¿le pasó eso?
Sí, exacto, es la paz, la tranquilidad, la confianza de estar con una persona y la madurez, uno va viendo todas esas cosas y se va dando cuenta que esa es la persona con la que uno quiere estar.
-¿Todavía trabajan juntos?
No, ya no tanto porque estoy trabajando en la Universidad UISIL, donde soy coordinadora del departamento de talleres y cursos libres, ya voy a cumplir cuatro meses, entonces eso y el modelaje me hacen correr mucho.
Con él estuve haciendo mascarillas para recaudar fondos y ayudarle a la gente que la estaba pasando mal por lo del coronavirus, también tenía que salir corriendo a buscar alcohol, mascarillas y algunas cosas para la farmacia.