Lussania Víquez aún sigue sin creer que por fin su anhelo de ser madre se cumplió y que será por partida doble.
Fueron más de seis años luchando por quedar embarazada que terminaron el pasado 6 de diciembre, cuando le dieron la noticia luego de dos años de tratamientos médicos con un especialista en fertilidad.
Cabe recordar que ella es sobreviviente de cáncer de mama y además, le detectaron recientemente que tiene una mutación en la sangre, por lo que tiene que inyectarse a diario para evitar que le den coágulos inesperados.
La presentadora de Informe 11, Las Historias y su esposo Jorge Sáenz, ya habían tenido además una pérdida en el 2020, por eso este embarazo por partida doble los tiene vueltos locos de amor.
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- ¿Cómo recibió esa noticia tan ansiada y esperada?
Nosotros estábamos en medio de un tratamiento con el doctor y ese día nos tocó hacernos un examen de sangre, que fue el 6 de diciembre. Nosotros lo que hacíamos es que nos quedábamos de ver en la casa para juntos abrir el correo (esta era la tercera vez que averiguarían si quedaron ‘embarazados’).
Cuando voy manejando hacia la casa, me llama la secretaria del doctor y me dice: ‘uy, necesito que se parqueé un momentico’ y yo: ‘¡Ay Diosss míoo!’ (en tono de preocupación), y ahí fue donde me lo soltó: ‘Lussania, estás embarazaaada’, casi me infarto e inmediatamente me dice: ‘y no es uno, son dos’, de una vez, así sin anestesia.
- ¿Cómo le dio la noticia a su esposo?
Él estaba esperándome para abrir el correo sin saber que yo ya sabía, traté de contenerme para que no me viera llorando, pero qué va, ahí tuve que decirle la noticia que íbamos a ser papás y no de uno, sino de dos, y me decía: ‘¿es en serio?, no vacile con eso, ¿es en serio?’ y yo: ‘sí, mi amor, vas a ser papá de dos’. Nos pusimos a llorar los dos y ha sido lo más bello y maravilloso que hemos vivido.
- ¿Qué sintió cuando se enteró que son mellizos?
Sentí mucha emoción, pero a la vez susto, por todo, por lo que implica un embarazo gemelar, porque aunque me siento joven, tampoco tengo 25 años (tiene 37), pero también pensé, bueno, si Dios nos lo dio así, es porque Él sabe que nosotros podemos y Jorge es mellizo, entonces, ya está mi suegra toda linda pasándome todos los tips.
- ¿Después de tantos tratamientos por el cáncer, que es lo que más le preocupa?
Voy viviendo muy el día a día, vamos a ver cómo sigue todo, primero Dios que bien y pidiéndole a Dios que yo pueda producir bien lechita por la radioterapia en la mama izquierda, eso no se puede saber hasta que llegue el momento, porque hay conductos que se pudieron haber secado, entonces, me daré cuenta hasta que nazcan los colochudos o las colochudas.
- ¿Ya les dieron las fechas del posible nacimiento? y Sé que el 2 de agosto es muy especial para ustedes...
En buena teoría están entre el 27 de julio y 2 de agosto, que sería tan lindo que nazcan el día de la Virgencita de Los Ángeles. Fueron tantos años haciendo la romería pidiendo eso, de hecho el año pasado, que me tocó trabajar en la Basílica, me escapé de unas entrevistas que tenía que hacer para ir a pedirle de nuevo el milagrito y ahí me confesé y todo, entonces, sería superlindo que nazcan un 2 de agosto.
- ¿Está con algún tratamiento especial por su condición?
Estoy con full vitaminas y con un tratamiento que me tengo que inyectar todos los días, porque tengo una mutación en la sangre y ese es todo un tema, porque si no me inyecto esto todos los días, los bebitos podrían estar en peligro. Lo demás son más cosas de cuidado, porque ya se me empezaron a inflamar los pies, las manos, ya los anillos de matrimonio no me entran y con apenas casi cuatro meses. Ya el doctor me mandó a usar una faja especial para la pancita, porque están bien grandecitos los colochudos, y unas medias de compresión por el tema de retención de líquido. Además, empecé a nadar hace como una semana y a caminar por ratitos, pero cuidando la frecuencia cardiaca.
- ¿Ya pasó el proceso de los achaques?
Vieras que no me dieron. En diciembre sí estuve muy mal del estómago, me dio una inflamación intestinal terrible y unos vómitos, pero no eran achaques, sino que fue producto de los tratamientos y mi cuerpo lo resintió.
Lo que sí es que estoy con muuucho sueño, parezco un osito. Estoy en un semáforo y digo: ‘Dios mío, ayúdame a estar despierta’.
- ¿Cómo hizo para aguantar tanto tiempo para dar la noticia?
Vieras que esa fue la parte más difícil, me tocó usar ropa más flojita, pero un día me mareé al aire y traté de disimular y al otro día ya empezaron a escribirme por Instagram: ‘para mí que está embarazada’, ‘con razón la veo tan gordita’, pero todavía es muy reciente y teníamos que aguantar más.
- ¿Cómo han estado los chineos familiares?
No tenés una idea, mi familia lloró como niños pequeñitos cuando se dieron cuenta, no lo podían creer, igual la familia de Jorge. Mi sobrinita, la hija del hermano de Jorge, está que todos los días le tengo que pasar fotos de la pancita y muy contenta de que va a ser la prima mayor. Me siento muy chineada, muy amada y siento que desde antes de que Diositos los pusiera en mi vientre, ya los amaban y esperaban.
- ¿Es cierto que estuvieron a punto de adoptar?
Sí, en noviembre. Lo que íbamos a hacer era una adopción directa y resulta que la muchacha se arrepintió, no se concretó y Dios fue tan maravilloso que dos semanas después nos dimos cuenta que estábamos embarazados.
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