Farándula

Lussania Víquez: “Cuando me diagnosticaron muchos de mis amigos se fueron”

Presentadora ahora se dedica a dar charlas sobre cómo enfrentar un diagnóstico de cáncer de mama

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Lussania contó que cuando le hablaron de cáncer creyó que se le quitaría con solo operarla y que no cayó en cuenta del grado de complicación hasta que empezó a ver que otros amigos iban perdiendo la batalla. Instagram

Hace ocho años la presentadora Lussania Víquez recibió la noticia de que tenía cáncer de mama y ella decidió enfrentarlo llena de positivismo.

Tras salir victoriosa de esa dura batalla, ella se ha dedicado a dar testimonio para demostrarle a la gente que la palabra cáncer no siempre es sinónimo de muerte.

A través de charlas privadas y de las campañas rosa en las que participa, la comunicadora no solo trata de hacer un llamado a la importancia del autoexamen de mamas, de lo valioso que es hacerse un ultrasonido o mamografía y de lo reconfortante que es acompañar al enfermo de cáncer en todo momento.

Ella fue diagnosticada cuando apenas tenía 26 años y una de los momentos más dolorosas que le tocó enfrentar durante el proceso fue cuando muchos de sus “amigos” se olvidaron de ella.

“Recuerdo que cuando me diagnosticaron muchos de mis amigos se fueron, se alejaron, yo diría que un porcentaje bastante alto y eso es supernormal. La gente bajo la premisa de que ‘yo no sé cómo actuar’, de que ‘yo no sé qué decirle’, entonces, opta por alejarse, pero eso es muy duro”, contó.

Esta es una de las fotos que guarda con cariño de aquel proceso pues la hace recordar que sí se puede vencer la enfermedad. Cortesía

Como Lussania sabe lo que en el fondo siente un enfermo de cáncer, es que ha tratado de generar un poco de conciencia en este aspecto para que los familiares y amigos sepan cómo actuar.

“No importa que usted no tenga nada qué decir, preocúpese por estar. No hace falta decirle al paciente ‘todo va a salir bien’, porque uno no sabe si será así, pero si solíamos tomar café, sigamos tomando café, si solíamos hablar sigamos hablando, es seguir estando para esa persona.

“Es muy duro luchar contra la enfermedad, contra el cambio físico, con todo lo que representa y además quedarse sin amigos, quedarse sin ese soporte o esa red de apoyo que es fundamental”, agregó.

Su familia fue ese bastón en su lucha, pues nunca olvidará cuando su madre la acompañaba a las quimioterapias o sus hermanos le ayudaban a cambiarle el drenaje.

Mensaje de esperanza

Este año la presentadora del noticiero Telediario, de Multimedios, es la imagen de dos campañas muy importantes del movimiento rosa llamadas “Juntos por la cura” y “Salvemos vidas”.

En ellas se ha dedicado a llevar una palabra de aliento a aquellos que apenas están empezando su lucha por medio de videos que postea en las redes sociales y de paso aprovecha para recordarles que se puede salir victorioso.

“Lamentablemente, las personas tiende a asociar cáncer con muerte, entonces, cuando les hablan de algún tipo de cáncer se piensa siempre en los peor, pero no es así porque en Costa Rica la sobrevida de las pacientes de cáncer de mama es más de un 85%. Tenemos uno de los mejores índices de toda Centroamérica y eso es muy bueno, muy positivo”, mencionó.

Lussania asegura que hablar de este tema le encanta, a pesar del tratamiento doloroso que vivió, porque sabe que con su mensaje de prevención se pueden salvar vidas.

“En mis charlas les digo que no nos atengamos porque somos jóvenes, comemos bien, hacemos ejercicio o no tenemos sobrepeso, porque igual hay que chequearse. Así como uno invierte en el cabello, en las uñas, en la ropa y en un montón de cosas es importante invertir en esos chequeos periódicos porque al final, son los que marcan la diferencia entre la vida y la muerte”, señaló.

Valora más cada detalle

Aunque la enfermedad ya no está en su cuerpo desde hace más de dos años, Lussania debe seguir en constantes chequeos médicos. Precisamente, este lunes tiene un TAC de tórax para verificar que todo está bien.

La presentadora reconoció que en el fondo no deja de sentir miedo cada vez que va a una cita, pues uno de sus mayores temores, es que le digan que el cáncer regresó por eso vive cada día como si fuera el último.

“La Lusannia de hoy valora todo muchísimo más, o sea, un rayo de luz lo valoro más, si llueve lo valoro más, si puedo ver un atardecer en la playa ni hablar. Eso para mí es contemplación y vida absoluta, entonces, como que uno aprende a ver cada milagro o cada cosita como un gran milagro”, dijo.

Además confesó que lo que más le enseñó la enfermedad es que sus sueños nunca se detuvieron ni las ganas de cumplirlos, algo que la hizo sentirse viva.

Silvia Núñez

Silvia Núñez

Periodista de Espectáculos y Sucesos. Bachiller en periodismo de la Universidad Central desde el 2004. Labora en el Grupo Nación desde el 2013.

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