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Un ilusionista de Las Vegas se desmayó este jueves al escuchar que le clavaron 20 años en prisión y una multa de más de 500.000 dólares (poco más de 303 millones de colones) por tener en su poder pornografía infantil.
Jan Rouven Fuechtener, un alemán de 40 años, se puso tieso y cayó hacia atrás sobre su asiento cuando la jueza federal Gloria Navarro rechazó su disculpa y junto a este su intento de demostrar que no obtuvo gratificación alguna con los miles de videos e imágenes pornográficas que el FBI encontró en archivos protegidos con contraseñas en nueve computadoras que tenía en su residencia, apodada la “casa de la risa” .
Fuechtener se recompuso tras beber un trago de agua. Sus abogados dijeron después que no estuvo claro si llegó a perder la consciencia.
La jueza calificó a Fuechtener como un mentiroso descarado y manipulador que prolongó su proceso en la corte “como una telenovela” pues según ella, lo único que lamentó el hombre era que lo hubiesen atrapado. La jueza le ordenó a Fuechtener pagar 70.000 dólares (cerca de ¢43 millones) adicionales en restituciones a las víctimas identificadas en los videos.
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“Esto no es aceptable aquí, ni en Alemania, ni en ninguna parte”, dijo la jueza, quien describió los videos como no solo niños teniendo sexo, sino actos sádicos y violentos”.
Previamente, la fiscal Elham Roohani lloró mientras recordaba los “gritos desgarradores” y “gemidos” de niños obligados a tener sexo con adultos en archivos que revisó mientras se preparaba para el caso.
Aun así, Navarro sentenció a Fuechtener a menos de los 23 años (le metió 20 años), recomendados por funcionarios federales de libertad condicional, a pesar de que la Fiscalía quería clavarle 30 años. La jueza dijo que Fuechtener no podrá ser liberado antes de que cumpla 60 años de edad y que probablemente sea deportado a Alemania.
