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El locutor Gustavo Gamboa llega este miércoles al programa La hora geek, de Ok radio, con la seguridad de que aunque es un lugar nuevo para él, definitivamente caerá en su charco.
Y es que Tavo es todo un geek, pues conoce, disfruta y colecciona figuras, películas, cómics y todo tipo de artículos relacionados con las historietas de Marvel, DC Cómics y más. Tiene una oficina repleta de sus tesoros.
Lleva 15 años alimentando su colección y a pesar de que ya es todo un hombre de familia, el pasatiempo nunca lo ha perdido y más bien fomenta en sus dos hijos el aprendizaje de ese mundo. Eso sí, los pequeños saben que es sólo ver, no tocar.
El programa al que se unirá se transmite los miércoles de 7 p.m. a 9 p. m., en Ok radio (105.5 F. M) y trata temas de manga, animé, dibujos animados, videojuegos y más.
El locutor nos compartió un poco de esta faceta poco conocida de él.
-¿Qué va a hacer en La hora geek?
El programa ya estaba, pero ahora viene renovado, de siete a nueve de la noche y ahora yo me voy a incorporar con la parte de cómics, que no la tenían tan fuerte.
-¿Se considera geek?
Sí, mucho. Me gustan muchas cosas y los cómics como tal me encantan, Marvel, DC, lo que es Star Wars y de ahí es que sale mi colección de muñecos.
Incluso tengo de Dragon ball y figuras de cine y de televisión, además todas las películas de superhéroes que se puedan imaginar, viejas y nuevas.
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-¿Cuántos muñecos diría que tiene?
El número exacto no lo sé pero yo creo que más de 300 a 350.
-¿Cómo los ha conseguido?
Tengo unos quince años de comprarlos, los he conseguido aquí, también en línea a otros países o si alguien iba o yo mismo iba siempre sacaba el rato para ir a comprar. Además, en redes sociales hay un mercadillo geek muy interesante de figuras nuevas y usadas.
-¿Cuánto es lo más que ha llegado a pagar por una figura?
No soy de comprar figuras caras, hay un estilo que son los hot toys, que son como unas estatuas grandes y son bastante caras. En mi caso,. prefiero las figuras de 3,75 centímetros, que son relativamente baratas. Tengo unos que son una colección y que se arman con partes de otros muñecos, entonces hay que comprar hasta 7 y esos son caros. Tengo uno de X Men que cuesta unos cien mil colones.
-¿Sus hijos pueden tocarlos o tienen que estar de lejos?
Creo que es algo cultural; Saúl que es más grande sabe que son de colección, los ve, me pide que le hable de ellos pero no los toca, él de todos modos tiene los suyos.
-¿Sacaron el gusto por ese tipo de cosas?
Creo que sí, uno de pequeño ve lo que le gusta al papá y lo sigue, él me habla de Star Wars y se nota que le gusta, aunque he tratado no forzarle nada. Aunque he visto que su hobbie son los carros porque se sabe todas las marcas.
-¿Qué significa es esa oficina para usted?
Es mi lugar de trabajo pero se ha convertido como en mi santuario porque también tengo discos compactos, una pared completa, otra de películas, la de los muñecos, otra de cómics y carros.
-¿En algún momento pensó que iba a tener una colección así?
Creo que sí, colecciono cosas que sé cuántas son, líneas completas y por eso he durado quince años en esto, ya de hecho estoy llegando al final de varias líneas después de tanto tiempo. Hay otras como Star Wars que parecen eternas.
-¿Se ha jalado alguna torta gastando plata en eso que no debería?
No, trato de ser ordenado porque uno se puede llegar a volver loco; voy poco a poco, si cae una platita extra compro, pero la amenaza constante está, en el momento que haga falta me venden los muñecos (la esposa, Vicky Fuentes).
-¿Le pondría precio?
Sí, hay uno realista y el que no cree que debería valer. No creo que pueda de un solo golpe, pero sí hay mercado para esto. Pero por ejemplo, lo mínimo que puede costar un muñeco de esos son ocho mil y hay piezas un poco más valiosas, así que saquen cuentas.
-¿Tiene alguno preferido?
Mi superhéroe favorito es Batman, pero tengo varias piezas que me han costado un mundo conseguirlas, hay varios que valoro mucho.
-¿Sus compas lo vacilan o lo admiran por eso pasatiempo?
De las dos, dicen que soy un inmaduro por andar jugando con muñequitos y por usar camisas de superhéroes pero también saben lo que ha costado.
