Un verdadero milagro vivió hace unos días el periodista Gerardo Zamora, el cual lo tiene a él y a toda su familia pegando brincos de felicidad y agradeciendo montones a Dios.
Luego de ser operado por sexta ocasión, a finales de junio, por cuatro tumores benignos más que encontraron en su cabeza, sus últimos exámenes de rutina salieron limpios, lo que significa que ya no le aparecieron más.
El expresentador de Telenoticias contó en el programa De boca en boca que la última resonancia magnética salió limpia y que después le hicieron un TAC, el cual terminó de confirmar ese primer resultado.
Por eso conversamos con el comunicador herediano, quien nos contó que esta gran noticia lo tiene muy alegre y que ahora está concentrado en recuperar el 100% de la visión de su otro ojo, pues por los tratamientos y operaciones se ha visto algo afectada.
- ¿Cuándo le dieron la noticia de que los exámenes habían salido bien?
Después de esta última operación, me hicieron una resonancia en los primeros días de julio y por primera vez, en tres años, recibía un resultado favorable. ¿Qué es favorable? Que no aparecía ningún tumor, ni ninguna masa sospechosa, o sea, que estamos limpios.
Esa resonancia sale limpia y fue una felicidad total para la familia, para mí, para Ginnés (Rodríguez, su esposa), para los médicos. Hasta salimos a comer en familia para celebrar. Fueron tres años de llevar palo, porque lo que sucedía era que me extirpaban el tumor, me iba a la casa a recuperarme, dos o tres meses después me hacían el examen de rutina o de monitoreo y ¡pum!, se veía donde venía el tumor otra vez creciendo aceleradamente, entonces se venía otra cirugía y vaya de nuevo para la casa, hasta que por fin logramos erradicarlo.
Ahora en los últimos días de julio me correspondía otro examen de rutina muy parecido, que era el TAC, que es como una imagen de toda mi cabeza por dentro, y ese segundo examen también confirmaba lo que decía la resonancia, que estamos limpios.
Los resultados me los dieron a principios de agosto y fue como la noticia de que le doblamos el brazo al tumor, costó, pero se lo doblamos.
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- ¿Por qué es que le salían los tumores a pesar de ser operado tantas veces?
Es que resulté ser una paciente atípico. Esos tumores se llaman meningiomas y normalmente cuando se operan, al ser benignos, no vuelven a molestar y son de crecimiento muy lento, pueden pasar años, no semanas, para que vuelvan a crecer, pero en el caso mío resulté atípico, un paciente extraño porque al tumor le tomaba uno o dos meses y ahí venía otra vez, pero bueno, lo logramos.
Entonces estamos felices, con un alivio enorme y dándole gracias Dios por el milagro.
- ¿Igual tiene que seguir en control médico?
Exacto, no me han dicho cuánto, pero yo estimo que me van a practicar una resonancia por lo menos cada seis meses o así, hasta que llegue el momento que le digan a uno ya no, va jalando, está listo.
Todavía sigo en monitoreo y con un tratamiento para desinflamar el cerebro, porque eso sí me dijeron los médicos, que está inflamado por las radioterapias que me han dado, por las cirugías. Entonces, con un tratamiento de esteroides (pastillas), estamos desinflamándolo poco a poco, porque sino voy a tener, y la tengo todavía, entre otras secuelas, una disminución en la capacidad visual del ojito que me queda (el izquierdo).
Ahorita de 1 a 10, mi capacidad visual puede estar de 6 o 7, y la podemos seguir elevando conforme el cerebro vaya desinflamando.
- ¿Cómo sigue físicamente después de la última cirugía?
Superbién de todas mis capacidades, camino bien, como bien, duermo bien, yo estoy bien, es nada más ese proceso de desinflamación del cerebro para que el ojito que me queda recupere su capacidad visual.
Y en la parte anímica ya me siento mejor, porque un cerebro inflamado genera fatiga, entonces hubo un momento en el que tuve unos episodios de fatiga donde las ocho horas de sueño diario no eran suficientes, tenía que buscar el sofá o la cama para reforzar en la mañanita o en la tarde y ya eso prácticamente ha desaparecido, además el ánimo lo he recuperado.
- ¿Va a tener que usar algún anteojo especial?
Los doctores me dijeron que posiblemente tenga que utilizar, pero ya no por un tema cerebral o por las operaciones sino por la edad, el oftalmólogo me dice que como ya pasé los 40, a esa edad se deterioran muchas estructuras del ojo y ya tengo presbicia y hipermetropía, entonces me mandó unos lentes bifocales para atender eso.
- ¿Ya ha ido retomando su vida cotidiana?
Todavía en la parte laboral no porque producto de estas limitaciones visuales hemos optado por consolidar el tratamiento que me están dando y ver después cómo queda el ojito para regresar a la Universidad Nacional, por lo demás sigue todo normal, yo me sirvo mi comida, como solo, tengo una independencia total y ya he recuperado todas mis facultades, gracias a Dios.
- ¿Y el deporte, que es otra de sus pasiones?
No, por ahorita los médicos lo único que me dejan es salir caminar, entonces me pego caminaditas en las mañanas de unos 30 minutos aquí por el barrio, no puedo trotar, ni correr, ni ir al gimnasio, eso vendrá luego.
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