Con la misma pasión y amor que pone en la cancha, la futbolista Daniela Cruz, del Deportivo Saprissa, cuida y chinea a Pistacho.
Ese es el nombre del peludito que perdió la patita izquierda de atrás en un accidente y que luego fue rescatado por la también seleccionadora nacional.
Dani regresó al país tras su paso por el Espanyol de España y debutará el domingo con la “S” ante Suva, a la 1:35 p.m.
Ella se declara amante de los animales y no distingue raza, color ni sexo, para ella son seres que devuelven el amor que se les da y hasta lo multiplican.
LEA MÁS: Perro pasó de dormir en el cuarto de pilas a la cama de Maikol Yordan.
La volante del Sapri nos contó cómo va la recuperación de Pistacho y la convivencia entre ellos.
- ¿Cómo encontró a Pistacho?
Lo tengo desde hace como unos 15 días y lo conseguí gracias a que sigo en redes sociales a diferentes asociaciones que se dedican a rescatar animales y una de ellas es Fuerza Animalia.
Ellos le habían puesto Novu y el caso me impactó. Fue muy trágico porque anduvo 15 días con la patita guindando y en carne viva en Limón, y esta fundación lo rescató. Yo tenía intenciones de adoptar desde que volví al país y, al ver la mirada que tenía, decidí contactar a la asociación que me dio la oportunidad de tenerlo.
- ¿Le pidieron algún requisito?
Como yo sigo la página desde hace tiempo, para ellos fue fácil saber que el perrito iba a estar bien cuidado y, además, estamos en constante contacto con ellos y pasándoles fotos para que la gente vea los finales felices de los perritos que ellos rescatan.
- ¿Qué fue lo que la convenció de adoptar un perrito en esa condición?
La mirada tan bonita que tiene. Hubo un video que vi, donde él estaba con la pata guindando, en carne viva y el hueso afuera, pero igual le movía la colita a la gente que lo ayudaba, para mí fue muy conmovedor verlo.
- ¿Cómo han sido estas semanas con el perrito?
Muy lindas, es pequeñito. Tiene una herida grandísima, pero no se queja, siempre tiene la colita alegre, se porta muy bien. Por ser de la calle yo tenía la expectativa de cómo iba a hacer con sus necesidades y es supereducado, avisa cuando necesita ir, además es muy cariñoso y dócil.
- Ya la tiene enamorada, según escucho...
Sí, totalmente. Ya es el dueño del sillón, ya tiene cobertor para estar en la cama y ya está más que hallado.
- ¿Tiene más animales?
En la casa de mis papás tengo tres perros más, pero como he tenido que viajar, nunca había tenido un perro mío completamente, porque me parece que tener un animal es una gran responsabilidad, no es algo que se obtiene y se deja, es una relación de vida.
- ¿Qué se siente saber que le está salvando la vida a un ser vivo?
Se siente muy bien, siempre había querido adoptar a un zaguatito y ahora espero hacerlo con algún otro, porque creo que la afortunada soy yo, el amor perruno es diferente y llena otras partes del corazón.
- ¿Siente que no es lo mismo adoptar que comprar?
Sí, yo siempre he pensado que a los que nos gustan los perros, nos va a gustar cualquiera. Los de mi casa son tres pug y yo decía que podían pensar que soy doble moralista al ser de raza, pero no pagamos un cinco por ellos. Para mí pagar medio millón por uno, habiendo tantísimos esperando ser rescatados, es algo a lo que no le veo sentido, creo que es algo de educación en este tema.
- ¿Supo qué le pasó a Pistacho?
Lo atropelló una moto y lo dejaron tirado, anduvo 15 días así con la patita guindando.
- ¿Cómo está ahorita?
Como nuevo, ya camina, sube gradas, obvio que camina diferente, en sus tres patas, pero por dicha está superbién. Cuando llegó, coincidió con que nos encerraran como 10 días y se pudo acostumbrar a estar aquí, ya después que me tocó salir a entrenar se quedaba llorando, pero ya entendió que me voy y siempre regreso.
- ¿Qué le ha dicho la gente?
Los que somos amantes de los animales somos como un gremio y muchos me han escrito de que están muy felices de que terminara en mis manos. También me contactaron otros que tienen perros con tres patitas y ya quedamos en que cuando se pueda vamos a reunirnos porque nos sentimos identificados.
- ¿Ya le compró la camisa del Sapri?
No, todavía no, está pendiente al igual que la de la Sele. Ahí poco a poco va teniendo sus propias cositas, de la fundación me dieron camita y alimento para los primeros días, luego una tía le dio galletitas, unos palitos para limpiarle los dientes. Los perros de la casa de mi mamá le donaron unas suetitas y ahí vamos.
- ¿Recomienda a la gente adoptar o comprar?
Es una decisión personal, pero como lo dije antes, si uno quiere un perrito no debe importarle las razas, en estas fundaciones hay de todos tamaños, colores y características, para que la gente escoja el que más se adapte a lo que está buscando.