Una investigación contra los padres de una adolescente transgénero, quienes la apoyaban al cambio de sexo, fue suspendida este miércoles por un tribunal federal de Texas.
La investigación la ordenó el gobernador Greg Abbott, que calificó la transición como “abuso infantil”.
La semana pasada, Abbott ordenó al Departamento de Servicios de Protección Familiar de Texas (equivalente al PANI) investigar los casos de menores sometidos a “procedimientos de cambio de sexo”, que según él, “constituyen abuso infantil según la ley de Texas”.
En su orden, citó “cirugías de reasignación que pueden causar esterilización, mastectomías, extirpación de partes del cuerpo sanas y administración de medicamentos que bloquean la pubertad”.
La petición de Abbott se dio el 22 de febrero. Solicita a las agencias de Texas que investiguen a los “padres de niños sujetos a estos procedimientos abusivos”.
Poco después de la orden de Abbott, la mamá implicada en el caso judicial fue suspendida”.
La poderosa Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) y Lambda Legal, que defiende los derechos LGBTQ, presentó una demanda en nombre de la madre, por lo que un juez del tribunal federal emitió una orden de restricción que impide que el estado investigue a los padres.
El presidente Joe Biden emitió un comunicado condenando al gobernador de Texas por una “campaña cínica y peligrosa contra los niños transgénero y sus padres”.
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