Un par de invitados se pasearon en la fiesta sexual de fin de año que organizaron 70 personas en Barcelona, España.
Cuando todo era puro amor entre el montón de calenturientos, dos participantes de la orgía cometieron un error de principiantes: se equivocaron de dirección e intentaron entrar a la fiesta por una puerta equivocada. Esto provocó que el vecino se asustara, ya que pensó que se trataba de delincuentes que querían ingresar a su domicilio y llamó a la policía. Cuando los oficiales arribaron, el panorama no fue el mejor.
La insólita situación ocurrió en la localidad de Lissá de Munt, un pequeño pueblo en la región de Cataluña de 15.000 habitantes, informó Clarín.
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Según la alerta policial, los agentes recibieron la llamada de un vecino que contaba que dos personas intentaban entrar en su vivienda. Al llegar la patrulla identificaron a los sospechosos que les explicaron que iban a otra casa, en la que se celebraba una fiesta, y se habían equivocado de lugar.
Al estar en vigor las restricciones de aforo y la prohibición de fiestas ilegales, los agentes acudieron a esta vivienda y se encontraron con una celebración con entre 50 y 70 personas, sin contar las que había en el piso de arriba del inmueble, “practicando sexo”, según el informe.
Además, señala que eran “todos americanos, con prostitutas” que habrían alquilado la casa para dar la bienvenida al 2022 de la mejor forma posible. Señalan los agentes que la propietaria del inmueble tenía conocimiento del tipo de fiesta que iban a celebrar.
Por eso la policía local identificó a las personas y pasó informes al Ministerio del Interior para que se tramite un expediente en caso de incumplimiento de las normativas vigentes para evitar la propagación del covid.