Amalia Benavides, exesposa de Alonso Solís siempre demostró ser toda una señora y tras varios años de no estar en el ojo público, luego de la sonada separación con el exfutbolista, salió a dar declaraciones sobre la polémica en la que está metido el papá de sus hijas con su todavía esposa, Deborah Soto.
Soto denunció al Mariachi por violencia doméstica, pero Solís respondió que él es la víctima y que fue agredido durante toda la relación, por lo que uno no sabe ni a quién creerle, ya que las acusaciones de ambos bandos son muy fuertes.
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En una entrevista con el programa Giros de la fama, de Repretel, Amalia señaló que en todos los años que estuvo cerca del exvolante nunca hubo ningún tipo de violencia en su contra y por eso ve como una injusticia lo que está pasando con el tata de sus dos hijas y que dio las declaraciones porque sabe que ellas están sufriendo.
“Empezamos de quince años, éramos unos chiquillos y mi divorcio fue por infidelidad, no por violencia, todo el país supo mi historia y gracias a Dios lo pudimos resolver. Fue duro porque fue muy público, igual que la situación que está viviendo ahora, que afecta a mis hijas y a mi familia, pero él es una buena persona, tiene esa otra parte (infiel) que ya no es problema mío”, dijo Amalia.
“Lo que está pasando con él es una injusticia porque por lo menos yo que estuve con él quince años y tuvimos problemas al final, puedo dar fe de que no es una persona agresiva y jamás me puso un dedo encima.
"Mi apoyo es cien por ciento para él, porque sé que está siendo juzgado por todo el país, lo están acribillando, no le dieron oportunidad de defenderse ni de demostrar”, agregó.
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Ella es testigo de lo mal que lo ha pasado Solís, porque mucha gente lo ha juzgado en la calle.
“No quiere ni salir a la calle, la gente no tiene idea del daño que se hace a una persona en una situación de estas, las personas lo juzgan, hay hombres que le intentan armar pleito en la calle, mujeres que lo ven horrible, claro que le está afectando, mi hija cumplió años el fin de semana y no pudieron hacer nada para evitar problemas”, afirmó.
Incluso una de las hijas señaló que su papá es una persona muy tranquila y que nunca lo ha visto golpeando a nadie en toda su vida.
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Cabe resaltar que el hermano de Amalia, Carlos Benavides, es el abogado defensor del exfutbolista y según ella nos contó, jamás su familiar se atrevería a meterse en este caso si en algún momento ella o sus hijas hubieran sido víctimas de violencia.
Benavides señaló que por el momento no dará más declaraciones, por petición de Solís, para evitar que el problema se siga haciendo más grande.