“Me siento sobrecargada con todas las actividades de la casa, en estos momentos pasamos mucho más tiempo juntos y tengo que hacer teletrabajo, al igual que mi esposo, pero siento que tengo ahora más trabajo que antes. Esto me pone muy enojada y explosiva”.
Tiene que partir de un principio, la familia es un sistema de cooperación donde todos tienen que asumir actividades de forma justa sin que esto recargue más a uno de los dos.
Por tanto, puede seguir algunas orientaciones a nivel general:
1. Ambos son adultos y deben contribuir en todo dentro del sistema familiar, tanto en asumir responsabilidades, como en los procesos de entretenimiento de los hijos.
2. Es conveniente hacer una reunión y poner en el papel qué le va a tocar a cada uno, en qué momento y en qué horario se van hacer las cosas. Incluso deben delegar responsabilidades en los hijos para actuar con justicia.
3. Si se hace teletrabajo, hay que dejarle muy claro a la pareja y a los hijos que hay un horario de labores que se debe cumplir, que no se puede estar interrumpiendo.
4. Es importante que cada uno ponga sus propios límites, es decir: "Estoy trabajando y no estoy para temas de orden familiar”. Por supuesto, estos límites no deben poner en riesgo ni la salud física o emocional de los menores, pero se debe ser muy firme en esto y no caer en el juego de estar siempre disponible.
5. Pueden pedir ayuda a algún familiar que durante los espacios de teletrabajo les pueda apoyar con el entretenimiento y atención de los hijos.
6. Es conveniente hacer un esfuerzo por romper la distribución del trabajo tradicional que se tenía en casa y empezar a crear nuevos patrones de conducta, por ejemplo, en una familia donde el padre o el compañero de vida nunca ha cocinado, este es un buen momento para que aprenda, si una persona nunca lava la ropa es momento de que aprenda, para que nadie se sienta muy cargado.