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Cinco días después de que se anunciara el cierre de la icónica discoteca Miraflores, la Municipalidad de Heredia dio a conocer las irregularidades que detectó en el comercio, que tenía 54 años de funcionar en el corazón de esa provincia.
El sábado pasado a través de una publicación en Instagram, los propietarios del legendario local confirmaron su cierre debido a requerimientos que solicitó el municipio en la infraestructura y que no podían cumplir.
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Ángela Aguilar Vargas, alcaldesa de Heredia, indicó a La Teja que las exigencias tenían que ver con temas de accesibilidad; pero este jueves el ayuntamiento amplió sobre eso por medio de un comunicado que envió a este medio.
El documento subraya que la municipalidad detectó diversos incumplimientos de Miraflores en cuanto a exigencias jurídicas y de infraestructura, que son esenciales para cumplir con la normativa de garantizar la seguridad de los clientes y el acceso universal.
“Entre las principales irregularidades detectadas destacan el no cumplimiento de la instalación de rampas de acceso internas, un ascensor que cumpla con las especificaciones técnicas y la adecuación de los servicios sanitarios para personas en situación de discapacidad, normado por la Ley 7600, en resguardo de los Derechos Humanos de toda la población sin exclusión”, detalló el municipio.
Indicaron que estos requerimientos eran necesarios para tramitar la renovación de la patente de licores, trámite que se realiza cada cinco años.
“Se solicitó cumplir con los requisitos citados anteriormente, para lo cual se le otorgó un plazo, sin ser efectivamente cumplidos. En respuesta a esta solicitud de cumplimientos de requisitos, los responsables de la discoteca han presentado un recurso de revocatoria; el cual, actualmente se encuentra en proceso de análisis”, agregó el documento.
Según la Municipalidad de Heredia, Miraflores aceptó cumplir con las exigencias establecidas, a excepción de un tema relacionado con los espacios para estacionamiento.
“Desde el municipio entendemos que los requerimientos no son de corto plazo, por ello siempre hemos estado anuentes a colaborar con los plazos requeridos”, aclaró el ayuntamiento florense.
Hasta el momento, los dueños de Miraflores no han solicitado la cancelación de la licencia comercial del establecimiento, confirmó el Gobierno Local.
“La Municipalidad de Heredia reitera su compromiso con la accesibilidad universal, la seguridad, el bienestar de la comunidad y el cumplimiento del bloque de legalidad. Las medidas adoptadas buscan asegurar que todos los establecimientos operen de manera legal, accesible y segura, garantizando el beneficio colectivo”, se afirmó en el informe.
