Alonso Solís está metido en una gran bronca luego de que su esposa, Deborah Soto, le pusiera una denuncia por supuesta violencia doméstica y le pidiera el divorcio.
Esta información fue confirmada a La Teja por el Ministerio Público.
Aunque Debbie no quiso dar más detalles cuando nos concedió una entrevista, la mañana de este viernes en sus historias de Instagram aseguró que hubo agresión física.
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“La agresión llega a ser tan fuerte que cuando haces los que debías hacer hace tiempo, te quieren hacer sentir mal por eso. No esperaba ser una más de la lista, yo decidí salir del círculo. La adicción que provocan las relaciones tóxicas es tremenda y solo Dios nos puede dar el amor propio suficiente para salir de esto”, aseguró Soto en la red social.
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Hemos intentado conversar con Solís para tener su parte de la historia, pero no ha contestado ninguna de nuestras llamadas, pues inmediatamente sale el buzón de voz.
La ahora expareja está en pleno proceso de divorcio luego de, al parecer, haber tenido una fuerte discusión desde el domingo anterior.